La sociedad continuamente experimenta cambios relacionados al emprendimiento e innovación en virtud de que las sociedades se encuentran en un complicado proceso de transformación política, cultural, tecnológica, económica y social.

Los ciudadanos que consolidan su evolución en el progreso son los que abrazan proyectos de vida con la educación. La formación docente y su desarrollo profesional en la educación tiene que ser un punto enfático en las políticas inmersas en la enseñanza profesional continua, técnicas y potencialidades en óptimo nivel. La educación continua repercute en la identidad profesional docente, la cual es esencial en los maestros, demuestra la naturaleza de su trabajo, es un atributo de gran magnitud que identifica a la persona que asume como proyecto de vida la enseñanza. También intervienen puntos claves en su desarrollo, aspectos familiares y educativos. La identidad profesional docente se estructuraliza a través de la formación universitaria a partir de los conceptos que adquiere de la profesión, y de las relaciones que enriquecen en el diario vivir entre la identidad personal y la historicidad de su profesión, esto es lo que se denomina vocación. (O)

Ángel Luis Moreno Briones, doctor, cirujano general; Guayaquil