Señores que administran la ciudad, paren de una vez a los dueños de las calles que desplazaron a los vigilantes de tránsito y cobran para permitir colocar el carro, la moto..., en un pedazo de suelo público. Tienes que llevar en los bolsillos del pantalón monedas de un dólar, 50, 25 centavos, para pagar a cada joven, hombre, niño, mujer, que se cree policía de tránsito y debes darle para las colas.

Las personas que trabajamos y ganamos sueldo bajo, no exigimos a nadie plata, pero a nosotros nos caen los dueños de las calles, en todos los lugares donde no hay parquímetros. No les pagas y te golpean el vehículo. Un abuso. ¡Basta! (O)

Agustín Martínez, Guayaquil