No tienen vergüenza, inteligencia. ¡Cómo buscan tomar de una forma no civilizada la gobernabilidad del Ecuador y autoelegirse mandatarios de los ecuatorianos con el objeto de ‘salvar’ al país de la ‘corrupción’, cuando ellos imponen su antojadiza pretensión inconstitucional con actos de terrorismo, incendios, raptos, asaltos...! Todo esto no solo es corrupción sino son delitos muy graves en contra del Estado y del pueblo.

Creen que los ecuatorianos no nos acordamos del octubre negro de 2019, de la barbarie sanguinaria que también llevaron a cabo en Quito, Cuenca, etc., con el mote de marcha o paro ‘pacífico’, y no pagaron los millones de dólares de las pérdidas materiales que originaron los días de las manifestaciones, ni pagaron con la cárcel, porque políticos corruptos compinches les favorecieron con la impunidad. Deberían estar desde hace años con cadena perpetua. (O)

René Merizalde O., Quito