En medio de la crisis económica que nos ha golpeado por la pandemia, existen consecuencias, quiebra de comercios, desempleos, dificultad para cancelar deudas, etc. Me permito hacer una exhortación a todas las personas, que aportemos con valiosas sugerencias a las autoridades para que realicen los trámites que tiendan a solucionar estos graves problemas que requieren la urgente atención.

Por tanto, quiero que se proceda como crean conveniente a congelar los valores de los arriendos de inmuebles por cuatro años para desahogar aquella preocupación. Como contrapartida, se apoye a los propietarios de inmuebles con la congelación de valores tributarios. El espíritu santo nos ilumine para que el país marche hacia adelante. (O)

Vicente Eduardo Ocaña García, doctor en Medicina, Guayaquil