Los cambios demográficos son de tal relevancia que en pocos años el número de personas de más de 60 años superará la cifra de los dos mil millones. No podemos esperar a mañana para preparar las ciudades. La vejez no es una etapa improductiva o inútil, como tampoco triste.

Llegar a la vejez es un don y un recurso que merece ser cuidado, también cuando la persona genera dependencia. Se trata pues de crear una cultura del cuidado a los adultos mayores, una cultura ciudadana nueva, que evite la ruptura entre el hogar y los recursos residenciales, favorezca los cuidados en el hogar y amplíe la red de los servicios solidarios. Se trata de un cambio cultural profundo para cuidar de los ciudadanos adultos mayores, ancianos. (O)

Jesús Domingo Martínez Madrid, Girona, España