¿Cómo acabar los asaltos, los robos a los teléfonos celulares?, son miles, se obtiene mucha información personal de las víctimas.

Al comprar un celular, el propietario debería grabar el nombre del almacén, estampar la foto y el logotipo del local, activar un sistema de bloqueo automático, escáner biométrico, cámara digital, etc., con características especiales que permitan grabar a quien lo está usando. Igual, las empresas vendedoras de celular podrían crear un pin o código de seguridad para cada comprador, para establecer en caso de robo si la persona que está usando el equipo es la dueña; si no, el almacén lo bloqueará como hacen los bancos con las tarjetas de crédito. Solo así se pueden proteger los datos, y en el momento de pérdida activen una alarma, sensor, mensaje de texto en la pantalla, grabación, que indique que al usarlo otra persona se bloqueará automáticamente. La policía será la primera en saberlo, siendo fácil ubicarlo con el GPS. Independientemente del valor, todos los celulares deberían tener dichas seguridades. El ladrón no podrá vender un celular robado ya que el comprador del teléfono podrá saber que es robado porque el equipo quedó inutilizado, y podrá reportar a la policía. Las empresas sabrán cómo volver a activarlo. Debe existir planes de seguridad de las operadoras telefónicas para detectar celulares robados. Caso contrario, el Estado no renovará contrato con operadoras. Así nadie más comprará teléfonos robados. (O)

Jorge Arámbulo Benavides, abogado, Guayaquil