Quisiera poder decir que es intolerable lo que se vive en la Asamblea... Quisiera decir que aquellos pagarán las consecuencias. Quizás, incluso, poder decir “los de ahora ya no son como los de antes”, sin embargo la realidad es que los de antes son iguales a los de ahora.

... Los de la Asamblea se aferran a montar el mismo show de siempre. Es, y siempre ha sido, de una forma desvergonzada la forma como se pretende engañar a los ciudadanos. No puede ser más contundente lo expresado por cierta asambleísta: Si roban, roben bien, pero no se dejen ver. Un extranjero pensaría ¡qué palabras tan moralmente repudiables! ... El hecho es que quienes la escucharon recibieron el consejo con un estruendoso aplauso. Ecuador necesita un cambio hacia la ética y los valores que debe ser provocado por su pueblo, por los servidores públicos, en primer lugar, como los asambleístas, y cada uno sienta que si planea resistirse, recibirán el repudio a sus actos por parte del pueblo a quien le deben sus puestos. (O)

Óscar Andrés Castelblanco Roca, abogado, avenida Samborondón