Observo a través de las redes sociales de la Municipalidad de Guayaquil los trabajos que se están realizando en la ciudad en temporada lluviosa. En la ciudadela Alborada, donde resido, ejecutan en áreas verdes, parques, desbroces de maleza, revisan el estado de los árboles ya que muchos se han afectado por la cochinilla causante del deterioro de las plantas; realizan asambleas con la comunidad donde anotan las peticiones para futuros trabajos en áreas verdes, justicia y vigilancia, control de vectores, etc.

Uno de los malestares de la comunidad es la falta de trabajo continuo del Municipio, ya debe ser frecuente, pero las autoridades argumentan que para llevarlo a cabo debe existir un pedido formal del comité barrial; siendo complicado, a la mayoría de moradores no les interesa formar comités. Otra problemática son los asaltos, los habitantes colocan puertas en casi todas las calles peatonales, afectando el libre tránsito lo cual es prohibido por la ley. Las puertas permanecen cerradas, solo tienen llaves quienes habitan ahí. Recientemente estuvo visitando una autoridad del departamento municipal de Justicia y Vigilancia, a quien también se le impidió el ingreso en algunas de las manzanas donde hay puertas. Sugiero que el Municipio cobre en los tributos valores para guardianía en las zonas cerradas. Pido que los fondos públicos sean mejor administrados. (O)

Maritza Isabel Chávez Tigrero, Guayaquil