Este foro alega que la mayor carga física, mental, en la pandemia, recae en trabajadores sanitarios y del orden público, que en condiciones difíciles se exponen en la lucha contra el COVID. (I)

Silvio Marcillo
Es justo. La ley humanitaria debe ser humana con los trabajadores de la salud, médicos, enfermeros..., y con recolectores de desechos, policías, etc., en esta pandemia del coronavirus ellos no descansan, reciben una paga miserable, no tienen equipos de seguridad, ni autoridades ni leyes que haga justicia a ellos y sus familias.
Por otro lado, el pueblo indisciplinado no cumple normas de bioseguridad, se enferma de COVID-19, colapsa hospitales, clínicas, centros médicos, aumenta el trabajo del personal de salud que ya no aguanta más la carga y tensión, mala noche, atendiendo a muchos indisciplinados contagiados que regresan de viajes, celebraciones, fiestas... (O)

Álex León Ramírez
En su oportunidad la Organización Internacional del Trabajo (OIT), que tiene tinte distinto, describió estos problemas agudos como fuentes de conflictos en las relaciones laborales, independientemente del régimen político o económico que impere en un país.
Otra paradoja es la falta de capacitación, se requiere esfuerzo mayúsculo, especialmente en relación con los cambios tecnológicos en los sistemas informáticos. Frente al progresivo deterioro de la situación económica hay mucha preocupación en el sector de la salud –no es el único– por el desempleo que azota a la sociedad actual y sus secuelas de orden social, familiar y múltiples problemas sin solución a corto plazo. Desde el resurgimiento del orden democrático, candidatos a la primera magistratura ofrecen reactivar el sector productivo, lamentablemente los índices de desocupación son cada día mayores. (O)

Arturo Guevara
Considero justo los reclamos de médicos y trabajadores de la salud en Ecuador. Hace casi 70 años que el código de trabajo no ha sido corregido a beneficio de la clase trabajadora. Actualmente solo se beneficia a empresarios, algunos despiden gente cuando les da la gana sin consideración, tiempo de servicio, dan liquidaciones que son miseria.
El nuevo Gobierno deberá sensibilizarse con la gente humilde que sobrevive solo con su trabajo, leyes que protejan de la injusticia en esta crisis, donde se ha evidenciado egoísmo de ciertos gerentes en contra de sus trabajadores. Los ecuatorianos consideramos al trabajo motor para el equilibrio emocional y económico. (O)