Hay cosas de las que es mejor no hablar, sobre todo cuando podrían alborotar el avispero.

El día que apareció el sobre, me dije: ¡Ahora sí que no pueden hacerse los locos! Pero nada ha pasado, aparentemente.

Y es así como, de tanto ‘dejar pasar’, se van volviendo frecuentes aquellas cosas que a la vuelta de los años la gente se pregunta: ¿por qué se toleran si riñen con la Ley y la decencia y perjudican a la colectividad?

Así fue como llegó a ser tácito recibir una comisión del diez por ciento por ‘facilitar’ la contratación de obras públicas –y hasta del 30 % en la década famosa, según algunos escandalizados–, el tráfico de influencia, el cobro de ‘diezmos’ en cargos públicos, la ‘gestión’ para el cobro de facturas represadas…

Revisemos estos tres hechos:

Uno: El medio digital La Posta, hace unos días emitió un video en el que expuso el contenido de un sobre que le llegó, obtenido presuntamente de un cajón con doble fondo del escritorio del prefecto del Guayas decesado, exponiendo documentos con detalles de cómo se manejaban las cuentas, contratos, coimas, asignación de cargos, etc., titulado “El testamento chueco de Morales. La prefecta Susana González…”. Para detalles, acceder a este enlace: https://www.pscp.tv/w/1DXxyAyzdVExM?t=31m50s.

Dos: El jueves de esta semana, la Asamblea Nacional censuró al exlegislador Daniel Mendoza, acusado de corrupción, y exigió al presidente Lenín Moreno la remoción de la ministra María Paula Romo, por haber recibido sugerencias de nombres por parte de Mendoza que luego fueron designados para ejercer cargos públicos. Romo ripostó: “La Asamblea me ha enviado un mensaje claro el día de ayer: no me perdona que haya investigado, denunciado y detenido a uno de los suyos”.

Tres: Un par de agentes de la Autoridad de Tránsito Municipal (ATM) –Guayaquil– fueron detenidos entre un grupo de ocho presuntos delincuentes que integraban una banda dedicada a asaltar a camioneros que transportan mercadería. Tras las detenciones realizadas por Policía Nacional, la ATM emitió un comunicado en el que ratifica que colaborará durante toda la investigación para determinar la responsabilidad de los involucrados. Invocando su política de “cero tolerancia” ante cualquier acto de corrupción en el que se involucre algún funcionario de la entidad.

La relación entre esos hechos es que la corrupción no está tan oculta, sus indicios saltan por uno y otro lado –se evidencia con la organización del cura Tuárez, la trama de enriquecimiento ilícito a costa de la venta de insumos médicos a los hospitales públicos, el tráfico de influencias con asambleístas–, pero va a depender de cómo reaccionan quienes están relacionados y tienen injerencia para ponerle un alto. Eso implica: el entorno próximo, autoridades y la ciudadanía. Por ejemplo, ¿qué hace la prefecta actual respecto al sobre referido?

Debe crearse en Ecuador un centro de pensamiento que se ocupe de investigar y encontrar soluciones para el combate al crimen organizado. Al respecto, ¿cuáles de los binomios están dispuestos a definir una estrategia en el presente, con proyección para una veintena de años por lo menos? (O)