Vivo en una urbanización al inicio de la vía Samborondón aproximadamente 15 años, y registro históricamente el pago de consumo de agua para 6 personas entre 40 y 50 dólares, alguna vez $60; de enero a mayo del 2019 el consumo promedio registró 49 metros cúbicos con un valor promedio de 46 dólares; en mayo sorpresivamente llegaron empleados de la empresa de agua potable de Samborondón y cambiaron el medidor sin mi conocimiento ni consentimiento; para junio la factura fue de $110,75; presenté mi reclamo a la empresa y recibí dos visitas, una sorpresa y otra programada, me indicaron que debo realizar el cambio de 2 flapers de inodoros y cambio de la boya de la cisterna porque era la causa de fuga de agua. Lo hice y los valores no regresaron al histórico, pedí revisión y cambio del medidor nuevo, que para mí es la causa de los nuevos valores, y me responden que el medidor está en excelentes condiciones y debe seguir operativo. Pedí la prueba del medidor anterior y la respuesta fue que ya es chatarra (agilidad increíble para chatarizar); tengo los reclamos y respuestas por escrito.

Para demostrar en números lo descrito después del cambio del medidor: de junio a septiembre 2019 consumo promedio en metros cúbicos 103; valores cancelados promedio 98 dólares, con el descuento de la ley del anciano (tercera edad) de 17 dólares; si pagaba promedio 46 dólares y ahora pago 98 dólares (sumado los 17 dólares: $115), el incremento es más del 100%.

Es justo mi malestar, es justo mi reclamo, pero Amagua ya dio por sentenciado que debo seguir pagando. (O)

Jaime Manosalvas Manosalvas,

médico; Samborondón, Guayas