Las urbanizaciones que pagan impuestos municipales en Daule, como Bonaterra (kilómetro 13 de la vía Samborondón-Salitre), necesitan al pie de sus ciudadelas semáforos y rompevelocidades porque es difícil cruzar la carretera. Lo mismo sucede afuera de la iglesia parroquial San Antonio. De esto se han publicado muchas cartas y ni una sola autoridad hace caso.
Tampoco ninguna autoridad se preocupa de poner servicios de buses y de taxis seguros y dignos, con paraderos especiales para los estudiantes y familias del sector. Pero ya están pidiendo votos.(O)
Gloria María Cifuentes,
Daule