El asesinato de Diana, en Ibarra, ha abierto el debate de dos temas de suma importancia para el país: la actuación de la Policía y la violencia machista contra la mujer, que implica a la justicia.

El año pasado se registraron 88 femicidios en el país; en el 66% de los casos el agresor fue la pareja o expareja. “No se confundan, el machismo está en tu casa” fue una de las frases que se corearon en la marcha masiva que se realizó en las calles de Quito y en la que se encendieron antorchas para “quemar” la visión machista de la justicia.

La ministra del Interior, María Paula Romo, en su visita a este Diario, el pasado viernes 11 de enero, sostuvo que la violencia social supera a los índices delincuenciales, pues el 57% de las muertes ocurre por violencia doméstica y el 47% se debe a violencia criminal.

Respecto del asesinato de Diana, la ministra aceptó que “se cometió una serie de errores en el procedimiento”. Sí, hay que mejorar la preparación de la Policía y su armamento, como también la administración de justicia para que las agresiones no queden impunes, y estudiar qué soluciones se deben implementar desde los ámbitos educativo y social para contrarrestar la violencia. (O)