Educación, cultura y deporte constituyen una trilogía en la que debe sustentarse la formación. Este Diario a través de notas recientes ha ido poniendo en evidencia el abandono de la práctica deportiva en los colegios fiscales por falta de entrenadores. Uno de los entrevistados cuestiona: “Si manejan el deporte, ¿por qué no hay deportistas, por qué no hay entrenadores? ¿Qué hace el distrito, vigilar al rector para que no hable? Esa oficina está encima del rectorado, ¡es un absurdo!”.

El sitio web del Ministerio de Educación expone como parte de su misión: “Garantizar el acceso y calidad de la educación inicial, básica y bachillerato a los y las habitantes del territorio nacional, mediante la formación integral, holística...”. Sin embargo de que en las mallas curriculares consta la educación física, no se incluye la práctica deportiva; tampoco esta consta entre los 13 objetivos de la planificación estratégica de ese ministerio.

Ahora más que antes, los niños y adolescentes necesitan incentivos formativos, y los deportes son una vía para promover su desarrollo e integración social. El Estado, a través del Ministerio de Educación y de la Secretaría del Deporte, debe retomar su formación deportiva sin demora. (O)