La ciudadanía ecuatoriana no puede sino congratularse por la presencia del avión Orion P3, producto de la nueva y necesaria visión política de cooperación internacional en el área de seguridad con el Gobierno de los Estados Unidos. Es que a diario se conocen las diferentes formas de introducción y los cargamentos de drogas que ingresan a Ecuador y se almacenan especialmente en las zonas costeras de Esmeraldas y Manabí.

Además, la lacra de las drogas está afectando áreas vulnerables social y económicamente que consumen y las venden como negocio lucrativo. Basta ya de invocar nacionalismos falsos auspiciados por gente seudoanalista que no tiene sentido de patria. La vorágine del tráfico de drogas que azota al país desde años se fue acentuando en el descontrol con la magra mentalidad política del nefasto gobierno anterior. Aplaudo y deseo éxitos al combate drástico del flagelo de drogas y narcoterroristas, con el apoyo que siempre nos ofreció Estados Unidos, que por suerte para Ecuador el Gobierno actual lo ha retomado.(O)

Omar Vinicio Herrera Romero,
doctor en Contabilidad, Quito