Elevo mi voz de protesta. El 27 de julio de 2018 acudí a un centro comercial, de la ciudad, en mi vehículo con mi esposa, me ubiqué en una zona del parqueo cerca de la entrada peatonal alrededor de las 18:00, procediendo a realizar unas compras en un supermercado, me habré demorado 40 minutos.

Al regresar a mi vehículo y abrir la puerta del lado que conduzco, todo estaba desordenado, la secreta se encontraba abierta, se habían sustraído la mascarilla del radio de mi carro y unos dólares en monedas. De inmediato traté de buscar ayuda, al principio no la encontré. Un señor que estaba manejando un carrito de seguridad a pocos metros, además de tratarme groseramente no quiso darme la ayuda que le solicité (explicación). Se formó una discusión. Apareció un señor que se identificó como supervisor de seguridad, me invitó a subir a donde estaban las cámaras para revisar y constatar las ineficacias de estas, nunca se pudo observar el momento cuando me estacioné. Esto quiere decir que del lado derecho del de mi carro las cámaras son diminutas, por no decir que no sirven, porque no se pudo apreciar de ese lado cuando yo llegué; peor al ladrón abriendo mi carro, pero del lado izquierdo sí se pudo observar cuando fui a retirar mi vehículo. Tuve que esperar hasta el lunes para hablar con el gerente de la administración del centro comercial, no me atendió porque no llegaba al trabajo a las 10:00. Una secretaria dijo que era muy ocupado y me daba cita para después de 48 horas; tomó mis datos. Me llamaron para decir que no tenían tiempo para escuchar mi versión.

El día del robo se me acercaron dos señores que desconozco sus nombres, me comentaron que a ellos les habían robado en el mismo lugar, un radio al primero, y dos espejos al segundo; pero los de vigilancia dicen que no se responsabilizan por los robos, mientras tanto la sociedad padece atropellos. Si la administración no es responsable, deje que entre la fuerza pública que sí va a hacer mejor labor de control. La ciudadanía espera su colaboración, es mandato constitucional (artículo 158).

Procedí a realizar la respectiva denuncia.(O)

Juan Antonio Brando Álvarez, abogado, Guayaquil