Sobre los accidentes de barcos chocando contra el puente que va a la isla Santay, debemos ver si valió la pena la obra, se la aprovecha, es funcional, cuánto cuesta reparar por cada choque, cómo evitarlos; no se dé un día un accidente cuando turistas, ciclistas, familias, paseen sobre el puente.(O)

Renato García Pincay, Guayaquil