China sigue teniendo un exceso de producción y de capacidad de producción en muchas de sus industrias, creando con ello problemas al normal desenvolvimiento de la economía, no solo la suya sino a nivel mundial con no poca frecuencia, además de aumentar el consumo de energía y contaminación. Por ello, su gobierno implementa programas anuales de recortes a la capacidad productiva, muchas veces obsoleta, de algunas de sus empresas. Según el Ministerio de Industria y Tecnología de la Información de ese país, durante el año en curso se publicó ya la lista de empresas que tienen que eliminar o dar de baja las líneas de producción que el gobierno señale. La lista ha sido difundida en portales web oficiales, medios de prensa y expresamente se prohíbe que la capacidad en exceso que se va a eliminar sea transferida a otros puntos. Las industrias sometidas a “ponerse en forma” pertenecen a 19 categorías, siendo algunas la producción de acero, minería de carbón, metalurgia de cobre y plomo, producción de aluminio electrolítico, producción de cemento, de papel, de vidro, curtiembres, entre otras. En total 1558 empresas han sido objeto de recortes a su capacidad este año y con eso se satisfizo la meta anual.
El problema de la excesiva capacidad de producción no es nuevo en China, en especial para las 18 o 19 categorías de industrias que generalmente año tras año tienen que recortar algo de capacidad productiva. Durante los últimos cuatro años, el número de empresas que son obligadas a someterse al programa ha superado las dos mil anualmente, excepto este año que rebasó ligeramente las mil quinientas. Entre las industrias con capacidad de producción en exceso y que por lo tanto deben someterse a recortes, la industria cementera es la que agrupa al mayor número de empresas, representando más del 30% del total y en ocasiones cerca del 40%. Tal es así que el año pasado, de un total de 2.761 empresas a las cuales se les recortó capacidad, 1.053 eran fábricas de cemento.
De acuerdo con el secretario de la Asociación Nacional de Cemento, Kong Xiangzhong, desde hace más de diez años se viene hablando de la excesiva capacidad y pese a las medidas de control, todos los años esa capacidad crece por encima de la demanda. Según estimaciones del Instituto Económico de la Academia de Ciencias Sociales (Ieacs), actualmente la capacidad productiva de cemento podría acercarse a los 3.000 millones de toneladas al año (la producción fue de 2.184 millones el año pasado, según fuentes oficiales), cifra que sobrepasa incluso la demanda pronosticada de 2.500 millones de toneladas para el año 2015.
La producción de acero es otra de las muchas industrias con excesos de capacidad. Según el Ieacs, la capacidad anual de producción es de 900 millones de toneladas, pero el porcentaje de utilización de esa capacidad es apenas del 72%. Y es que en general, el grado de utilización de capacidad productiva de muchas industrias con excesos está en el rango del 70% al 75%, según Zhang Ping, director de la Comisión Nacional para la Reforma y Desarrollo.
Si bien los problemas que originan el exceso son estructurales, varios analistas coinciden en que los gobiernos locales son causantes en gran medida al ofrecer una serie de ventajas e incentivos para que las empresas se asienten en sus zonas de jurisdicción. Otros, como Zhang Xiaogang, gerente de una de las mayores acerías del país, mencionan que hasta hace cinco años, las altas ganancias que ofrecía su industria motivaron que inmensas cantidades de dinero se inviertan en ampliar la capacidad productiva.
El gobierno central, en tanto, sin dejar de abandonar los programas de recortes a la capacidad excesiva en las industrias, sobre todo aquella que por obsoleta contamina o consume energía o recursos en exceso y de modo ineficiente, fomenta también la fusión y reorganización de empresas como una manera de eliminar algo de capacidad. Otras medidas incluyen alentar a sus empresas a que busquen mercados en el exterior que reciban parte de esas capacidades. Y esta última medida podría significar oportunidades en los países en vías de desarrollo necesitados en desarrollar o mejorar industrias similares. Algunas de las empresas chinas que sufren recortes poseen líneas de producción y equipos en buenas o muy buenas condiciones, pues no todos los recortes se deben a tecnología o equipos pasados de moda. Eso significa oportunidades para adquirir tanto tecnología y/o equipos a precios seguramente atractivos y el conocimiento y experiencia de muchos años de parte de los empresarios chinos.
Las industrias sometidas a “ponerse en forma” pertenecen a 19 categorías, siendo algunas la producción de acero, minería de carbón, metalurgia de cobre y plomo, producción de aluminio electrolítico, producción de cemento, de papel, de vidro, curtiembres, entre otras.