Cuando Germán Cáceres llegó a La Roca, la cárcel de máxima seguridad de Guayaquil, fue despojado de la vestimenta con la que arribó de Bogotá, Colombia.

A él le esperaban una camiseta anaranjada y una pantaloneta, el uniforme con el que ahora se viste a los reclusos que llegan a ese centro de la vía a Daule.

La Roca es una cárcel que estuvo algunos años inhabilitada tras el escape de reos que burlaron su estatus de máxima seguridad. Está cerca al río y frente a urbanizaciones de clase media.

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A Germán Cáceres le dictaron prisión preventiva y lo trasladaron a cárcel La Roca de Guayaquil

Tras adecuaciones, el Gobierno la puso operativa para trasladar allí a cabecillas de bandas involucrados en revueltas y masacres en las cárceles.

A ese lugar han llegado líderes y cabecillas de bandas que estaban en cárceles de Quito y Santo Domingo. Algunos de ellos, usando recursos legales, habían sido trasladados de Guayaquil a esos centros penitenciarios.

La administración de Guillermo Lasso ha tratado de devolverle la categoría de máxima seguridad a La Roca, apartada de privilegios de los que gozaban los reos que antes tuvieron allí. En un par de veces ha mostrado a los reos sometidos en el piso del patio, uniformados.

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Además ha hecho requisas en las celdas para evitar el ingreso de objetos prohibidos.

Cáceres, quien llegó en una caravana de unos quince vehículos, fue colocado en una celda individual. Un espacio en el que caben una cama y una letrina.

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Él es sospechoso del femicidio de su esposa, María Belén Bernal. Ella desapareció el 11 de septiembre en la Escuela de Policía, donde Cáceres era instructor. Días después fue hallada muerta en el cerro Casitagua, ubicado a espaldas de la escuela policial.

El caso Bernal desde la desaparición de María Belén hasta la captura de Germán Cáceres

De lo que públicamente se conoce, él sería uno de los primeros reos que no han sido asociados a una organización criminal que llega a La Roca, aunque fue ubicado en la lista de los más buscados por violencia de género.

Germán Cáceres fue enviado a La Roca. Tomado de Presidencia Foto: El Universo

En los últimos meses del año pasado, el gobierno de Lasso trasladó a cabecillas de los Chone Killers, R7 y Los Lobos a ese reclusorio, luego de un proceso que intenta poner en orden y tomar el control de las cárceles.

El 18 de noviembre pasado, a La Roca fue llevado Jonathan Bermúdez, un cabecilla de Los Lobos que estaba en la cárcel El Inca de Quito y que está asociado a una masacre. Su traslado a La Roca originó otra revuelta en El Inca.

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La Roca tiene capacidad para 100 reos, pero se conoce que allí hay 20 presos. Tiene espacios automatizados que se controlan desde una sala.

A los presos se los controla con un régimen de aislamiento para evitar que tengan contacto. Las salidas a espacios abiertos son controladas, limitadas.

El ministro del Interior, Juan Zapata, dijo a Ecuador TV que se lo trasladó a La Roca porque, de acuerdo con un análisis del SNAI (Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y Adolescentes Infractores), es la cárcel que ofrece seguridades y hay un menor número de personas privadas de la libertad en el lugar. “Esto genera la garantía que todos queremos”, señaló Zapata.

Colombia usó la figura de expulsión contra Germán Cáceres, sospechoso del femicidio de María Belén Bernal

Lasso se encargó anoche de postear el ingreso de Cáceres a La Roca. “Hoy estamos cambiando la historia con hechos. Durante años la gente se había burlado de la justicia y salido del país y punto final. Hoy hemos traspasado fronteras. Ese es el verdadero encuentro con la justicia, donde se actúa sin privilegios para vivir en un país de paz”, posteó el presidente en una serie de trinos en Twitter. (I)