‘Ella vio el explosivo y corrió al fondo de la casa’: tres menores que habitan junto al Municipio de Durán casi mueren en el atentado

Tres menores estaban solas en casa cuando sujetos encapuchados dispararon y dejaron un taco de dinamita en el portal de su casa, ubicada junto al Municipio de Durán.

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Las niñas corrieron a la última habitación de su vivienda en el momento justo en el que el explosivo detonó y reventó los cristales en un diámetro de casi 80 metros a la redonda.

Incluso el pilar de la vivienda de dos pisos quedó dañado, y esta semana ya los obreros del cabildo hacen los trabajos de albañilería para reparar la casa, donde funcionaba un bazar.

La dueña del inmueble contó que en la planta baja estaba una adolescente, y en el departamento del segundo piso había dos niñas más.

Ella explica que los sujetos primero realizaron disparos y luego dejaron el explosivo y corrieron.

“Mi hija me llamó por teléfono para decirme que tenía miedo, que estaban disparando afuera. Ahí medio se asomó por la ventana y vio a los tres hombres que se iban luego de dejar el taco de dinamita encendido a 50 centímetros de la ventana. Ella vio el explosivo y corrió al fondo”, explicó la mujer.

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Las niñas sobrevivieron milagrosamente a la fuerte explosión, que dejó rotos los vidrios y daños en las oficinas del Municipio. La detonación ocurrió casi a las 16:30.

Afortunadamente ya no había funcionarios, pues ese día habían matado a dos policías en el centro de Durán y el alcalde Dalton Narváez tomó la decisión de cerrar la jornada laboral temprano por la seguridad de los usuarios y trabajadores.

Un trabajador municipal dijo que, de haberse quedado hasta la hora normal, habría terminado muerto, pues su ventanilla de atención está a pasos del lugar donde detonó el explosivo.

Ya esta semana el Municipio atiende en horario normal, de 08:00 a 17:00, aunque tienen aún resguardo militar y policial. Al menos quince uniformados vigilan el sector, incluso por la parte posterior de la Alcaldía.

Hay unos 250 funcionarios que trabajan en los departamentos municipales ubicados en el centro del cantón ferroviario. Además, cientos de ciudadanos han vuelto al edificio municipal para hacer trámites que eran impostergables.

Raúl Cedeño fue para ponerse al día con el impuesto predial, pues indicó que está tramitando un préstamo hipotecario.

Acudió con cierto recelo, pero explicó que la atención fue rápida y que ver tantos uniformados lo tranquilizó un poco. Él tiene un almacén de repuestos, y durante casi una semana cerró las puertas. Pidió al alcalde que gestione mayor seguridad en el cantón.

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Mientras tanto, Narváez sigue lejos de su oficina por su seguridad. Esta semana finalmente se asentaron dos denuncias: una por las amenazas recibidas y otra por el atentado.

Además, una fuente de la Alcaldía indicó que los videos de seguridad ya están en manos de las autoridades. En la cinta se ve a los tres sospechosos disparar y luego dejar el taco de dinamita junto a un pilar de la casa que colinda con el Municipio. (I)