Durante el fin de semana, diez personas fueron asesinadas en Guayaquil. Solo entre sábado y domingo se reportaron siete casos, lo que eleva la cifra de muertes violentas en la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón) a 698. El año pasado, a la fecha, iban 293 muertes, lo cual demuestra que hay un incremento de 405 casos.
Los más recientes se dieron este domingo, 3 de julio, en la cooperativa Nueva Prosperina y en Flor de Bastión, en el noroeste.
El primer caso ocurrió cerca de las 10:00. Según testigos, un hombre bajaba herido la loma de la cooperativa Nueva Prosperina mientras era seguido por un sujeto armado. Segundos después de ver a ambos pasar por la calle, la víctima fue acribillada cuando bajaba por una zanja de la zona.
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“Aunque quiso escapar, no pudo: el sicario lo remató desde arriba y él quedó en la zanja”, comentó un morador que prefirió no identificarse.
Varias manchas de sangre quedaron como rastro de la ruta por la que intentó escapar la víctima, a la que ningún vecino reconoció.
A las 13:30 se reportó otro caso en el bloque 6 de Flor de Bastión. Ahí un hombre recibió seis impactos de bala.
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Las unidades especiales llegaron al sitio para levantar el cadáver.
Horas antes, en la madrugada, se reportó otro hecho violento: en la cooperativa Balerio Estacio, dos personas fueron asesinadas a tiros.
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Además, un hombre fue herido de bala en el suburbio de Guayaquil al intentar capturar a un ladrón que asaltó un local en la 27 y la H. La víctima fue llevada al hospital Abel Gilbert, donde se recupera.
Por otra parte, el sábado hubo tres asesinatos más. El primero se dio durante la madrugada en el Guasmo, en el sector conocido como Punta Arrecha. Ahí, un hombre de 25 años fue sorprendido mientras caminaba por la zona.
Al menos seis balas lo alcanzaron y, aunque fue llevado a una casa de salud, en el lugar solo se confirmó su fallecimiento.
La Policía indicó que en el lugar se encontraron 55 indicios balísticos, algunos de fusil.
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A las 08:00 se reportó otro caso en La Fragata, también en el sur de Guayaquil. La víctima habría sido asesinada a golpes dentro de un inmueble de la zona que funciona supuestamente como un centro clandestino de rehabilitación.
El paciente fallecido habría intentado escaparse esa mañana y fue recapturado, según contaron los vecinos. Su cuerpo fue llevado sin identificación a la morgue.
Poco después, a las 10:00, se reportó el hallazgo de un cuerpo en el “canal de la muerte”.
Moradores del sector dijeron haber encontrado el cuerpo de una mujer en las aguas del canal. Según los testigos, ella estaba maniatada. La policía realizó el levantamiento del cuerpo, pero aún no se ha dado información oficial de este caso ni se ha revelado la identidad de la mujer asesinada.
El viernes hubo tres casos más en Guayaquil
En Malvinas Sur, en la vía Perimetral, la mañana del viernes fue baleado un hombre que se resistió a un asalto. La víctima esperaba el bus cuando fue abordada por los ladrones.
El hombre, identificado como Adrián Carvajal, de 29 años, recibió un tiro en el tórax y, aunque lo trasladaron al hospital del Guasmo, en el sitio solo se confirmó su deceso.
Horas después, en la cooperativa 5 de Diciembre, de la isla Trinitaria, se registró otro asesinato.
Michael Loor Mera, de 21 años, fue baleado y llevado al hospital del Guasmo. Ahí se realizó el levantamiento del cuerpo. Los policías contaron que los moradores no permitieron el ingreso de agentes de Criminalística a la zona para levantar indicios; sin embargo, se detuvo a un sospechoso del crimen poco después.
La víctima presentaba varios tatuajes alusivos a organizaciones criminales que operan en el sector, por lo que la Policía investiga si el joven fue victimado por disputa de territorio.
En el sector de la cooperativa Juan Montalvo se dio otro crimen la noche del viernes. Adolfo Roche Rivas fue baleado cerca del mercado del sector. (I)