La asambleísta nacional reelecta por la Izquierda Democrática (ID) Wilma Andrade aceptaría una candidatura a la presidencia de la Asamblea Nacional, en el próximo periodo legislativo, si existe una cohesión de fuerzas con una agenda mínima. Para ella es muy temprano señalar si su bloque apoyará una eventual candidatura de la asambleísta de Unión por la Esperanza, Pierina Correa. En legislación espera cambiar el modelo de desarrollo, así como dar un giro a la fiscalización. Espera que se logre recuperar la imagen de la Asamblea, cuestionada por los ciudadanos que no encuentran beneficios en su labor.

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¿Cuál es la agenda que presentará la ID en la nueva Asamblea Nacional?

Cambiar el modelo de desarrollo enfocado en la producción, en la agroindustria y en la agroexportación, y para ello iremos hacia un Código de Desarrollo Agropecuario. Hay que ir a una reforma profunda a la seguridad social, tenemos una línea roja que es no a la privatización; y, un tercer elemento es la agenda de género enfocada en eliminar la brecha salarial para las mujeres, la inserción de la mujer en la toma de decisiones y la despenalización del aborto por violación.

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¿Por qué la ID no logró esto en la actual Asamblea?

Porque el modelo de desarrollo vigente está únicamente enfocado desde la Presidencia de la República, por eso debemos abrir un diálogo con quien gane las elecciones presidenciales para que nuestra agenda sea también abordada, analizada y discutida de manera transparente, y si es coincidente, tener el apoyo en la legislatura. Trabajar un Código de Desarrollo Agropecuario es muy complejo con solo dos asesores.

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Nosotros haremos el intento, presentaremos nuestras propuestas y el país podrá valorizar y reconocer qué grado de madurez tiene quien nos gobierna y qué grado de compromiso tiene con el país para una agenda conjunta en la Asamblea, porque el país está en una crisis profunda y una desvalorización de las instituciones como la Asamblea y el mismo Gobierno, que tienen bajos niveles de aprobación.

¿Cuál es el giro que daría la nueva Asamblea respecto a la fiscalización?

No hay la más mínima coordinación de las comparecencias de los ministros a las diferentes comisiones o grupos parlamentarios y tenemos semanas enteras a un funcionario compareciendo a una y otra comisión; eso debe ser normado para evitar un descalabro de la administración pública. Es medular que tras la destitución y censura de un funcionario la Asamblea realice un control posterior para corregir las irregularidades detectadas.

¿La ID votaría por Pierina Correa para la presidencia de la Asamblea?

Al momento no sabemos cuál va a ser el escenario, en su momento tomaremos la decisión de manera democrática con un análisis amplio y lógicamente de lo que le convendría al Ecuador, no podría definirlo ahora. Hay que buscar, más allá de las personas, la agenda legislativa que unifique el tratamiento y la ruta que tiene que tener la Asamblea en estos primeros dos años.

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¿Le gustaría presidir la Asamblea?

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Para mí y el bloque es fundamental la necesidad de un diálogo abierto, no es un tema de una opción personal, tiene que ser mirada de forma colectiva y consensuada con las diferentes bancadas, porque para estar en una ubicación cualquier que esta fuera hay que poner el diálogo primero para evitar ser testigos de una encarnizada disputa interna.

¿Pero usted no se cierra a esa opción?

Aquí lo decidirá el bloque, aquí no hay sino una propuesta muy clara de equilibrio que esperamos que sea escuchada y valorizada en la Asamblea de no aferrarnos de ninguna manera en una posición, sino de buscar un equilibrio para aproximar posiciones radicales que pueden darse.

¿Si bien el bloque decidirá, pero usted está dispuesta a asumir el reto?

Siempre he asumido retos y muy difíciles en mi vida, hice algo que muchos ecuatorianos y militantes creían imposible como es refundar un partido, que no lo lograron hacer dos o tres compañeros, y logré hacerlo tras un recorrido de dos años al país para armar la estructura y lograr 650.000 afiliaciones.

¿Entonces, se merece la presidencia de la Asamblea si ha hecho ese esfuerzo político por la ID?

No, no confundamos; yo hablo de mi fuerza y tenacidad que he logrado en mi vida en cualquier posición que he estado. No es un tema personal, sino que tiene que ser abordado como un tema de representación de ID que en la historia de la legislatura siempre ha tenido una posición loable y sobre todo reconocida. Hemos tenido a Jorge Zavala, Raúl Baca Carbo, Wilfrido Lucero, Guillermo Landázuri y a Andrés Vallejo como presidentes.

Entonces a la ID le falta tener a una mujer como presidenta de la Asamblea, ¿podría ser usted?

(Risas) Eso dejemos que se decida en el futuro; no hay por qué anticiparse, creo que hay que dejar sobre todo que exista una cohesión, si no hay esa cohesión en la Asamblea con una mínima agenda, de ninguna manera aceptaré. Pretender ser solamente testigo de una lucha intestina, en la que destrocen el país, no es el objetivo. (I)