En una entrevista con el medio colombiano El Tiempo, el expresidente Rafael Correa aseguró que su exministra María de los Ángeles Duarte era usada como rehén política por el gobierno de Guillermo Lasso para pedir apoyos a cambio de conceder el salvoconducto para viajar a Argentina que le fue negado y que la motivó a fugarse de la Embajada de ese país en Quito.

“Rompiendo el derecho internacional y la Convención de Caracas de 1954, Lasso se ha negado a darle el salvoconducto, que tiene obligación de darlo, y la ha utilizado como rehén. A nosotros nos ha mandado mensajes: si me apoyan en esto, podríamos dejarla libre, y lo que hizo María fue dejar la embajada”, indicó.

Correa aseguró que sabe muy bien cómo ocurrieron los hechos respecto al escape de Duarte que consideró totalmente justificado.

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Además cuestionó el accionar del Gobierno ecuatoriano de expulsar y declarar persona non grata al embajador argentino, Gabriel Fucks, que provocó la misma respuesta de parte de Argentina para el embajador ecuatoriano, Xavier Monge.

“El embajador argentino no se ha enterado de eso (supuestos mensajes de Lasso) y lo que hacen es expulsarlo y romper relaciones con Argentina, Es una locura, esa gente no sabe dónde está parada”, dijo entre risas.

Sin embargo, el choque diplomático, hasta el momento, no ha incurrido en una ruptura de relaciones diplomáticas, como indica Correa, y de parte de Argentina se sostiene la postura de que se mantiene “el profundo aprecio de Argentina al pueblo del Ecuador”.

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Asimismo, Correa reveló también que mantuvo un diálogo reciente con el canciller argentino, Santiago Cafiero, para tratar el impase diplomático.

“Me llamó para comentarme eso: ‘Oye, cómo es posible qué ocurra eso (expulsión de Fuks)’, y le dije ‘me muero de vergüenza y mil disculpas’”, subrayó.

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Correa dijo que el impase diplomático está “sacrificando el bienestar del pueblo ecuatoriano” por algo que el gobierno de Lasso mismo originó.

No obstante, desde la misma Argentina, este jueves se conoció una resolución que aprobó la Cámara de Diputados para exigir que se esclarezcan los hechos respecto a Duarte.

Una de sus principales inquietudes es una presunta reunión el viernes 10 de marzo, tres días antes de la notificación del escape, que se habría realizado en la embajada y que contó con la presencia de representantes de varios países, y en particular, con la del embajador de Venezuela, que le podría haber facilitado el acceso a su vehículo oficial a la exministra.

Ante lo complejo de los hechos, los legisladores reconocieron que pudo llegar a existir colaboración para la fuga o una evidente incapacidad de sus funcionarios para el control en su sede diplomática, en Quito.

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Además, pidieron conocer cuáles han sido los motivos para que el embajador en Venezuela, Óscar Laborde, recibiera pocos días después a Duarte en Caracas, en medio del agravamiento de un severo conflicto diplomático. Aunque luego aseguró que no se encuentra en la sede diplomática.

En tanto, Duarte fue sentenciada a ocho años de prisión por el delito de cohecho en el caso Sobornos 2012-2016, se encontraba en la Embajada argentina de Quito en calidad de refugiada desde agosto del 2020.

En diciembre del 2022, Argentina le otorgó el asilo diplomático y ella solicitó a Ecuador que se le otorgara un salvoconducto para salir del país, pero este le fue negado. (I)