No es una mansión. Es una casa de dos pisos, con 327 metros cuadrados de construcción, dentro de un modesto conjunto residencial de Tumbaco, en el valle oriental de Quito. No tiene piscina, sino apenas un patio. Viéndola desde fuera cuesta creer que Nilsen Arias Sandoval, el exgerente de Comercio Internacional de Petroecuador, haya gastado más de $ 600.000 en esa vivienda.

“No es una casa presumida, ostentosa, pero tiene acabados costosos”. Así la describe Damián Encalada Armas, quien remodeló el inmueble hace nueve años, en el 2014. La vivienda conserva la fachada de las demás en el conjunto, pero por dentro, cuenta el arquitecto, casi todos los materiales son importados: mármol de Carrara, granito Palomino, lámparas Swarovski… Un lujo.

La mayoría de los fondos para la adquisición y la remodelación de esa casa salieron de una cuenta bancaria a nombre de la offshore panameña Administraciones Carey del Sur S. A., cuya propietaria era Patricia Romero Espinosa, esposa de Nilsen Arias. Ahí ingresaron sobornos que agilizaron negocios con Petroecuador, según las investigaciones judiciales.

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Las transacciones de esa cuenta, abierta en el Credicorp Bank de Panamá, constan en una asistencia penal que la Fiscalía panameña envió a Ecuador. EL UNIVERSO analizó esas operaciones, las comparó con otros documentos financieros y judiciales, y las contrastó con varios testimonios. Así dio con la suma que Arias ocupó en esa vivienda.

En 2019, él vendió la propiedad a Ítalo Cedeño Cedeño, quien llegó a ser gerente general de Petroecuador en 2022. Este manifestó a EL UNIVERSO que pagó $ 330.000 por esa casa, una diferencia considerable con lo que Arias gastó en ella.

La cuenta de Administraciones Carey del Sur estuvo activa entre agosto de 2013 y abril de 2017. En todo ese tiempo ingresaron $ 5,7 millones. La mayoría provino de una offshore de Antonio Peré Ycaza, quien se declaró culpable en Estados Unidos de lavar los sobornos dirigidos a funcionarios de Petroecuador.

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Sobornos en Petroecuador: $ 5,7 millones ingresaron a una cuenta ‘offshore’ ligada a Nilsen Arias Sandoval

Las fiscalías de Ecuador y Estados Unidos coinciden en que Antonio Peré canalizó coimas a favor de Nilsen Arias provenientes de las comercializadoras de crudo Gunvor, Vitol y Trafigura, así como de la empresa Sargeant Marine Inc.

Las investigaciones estadounidenses apuntan a que Arias también recibió coimas de otras empresas. La acusación es por un total de $ 17,7 millones de sobornos, de lo cual Arias ya se declaró culpable. Él trabajó en Petroecuador entre 2010 y 2017, en el gobierno de Rafael Correa. Ahora está colaborando con las autoridades de ese país y, por esa razón, él y sus abogados han rechazado dar declaraciones públicas.

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La remodelación completa

El arquitecto Damián Encalada accedió a conversar con EL UNIVERSO en una cafetería. Estaba preocupado. La Fiscalía lo contactó la semana anterior y le solicitó que justifique todos los pagos que recibió de Administraciones Carey del Sur en un informe que tiene que presentar en los próximos días. Como han pasado tantos años, le inquietaba que le falte algún respaldo.

Los documentos bancarios provenientes de Panamá muestran que recibió un poco más de $ 443.000, en 26 transferencias realizadas entre marzo de 2014 y octubre de 2016.

Hasta él se sorprendió de la suma. Sostuvo que ese monto no reflejaba el costo de los trabajos en la casa, aunque dijo que no recordaba el valor final. Contó que tuvo que devolver unos $ 50.000 a Arias y que esos pagos también cubrieron otros dos trabajos, arreglos de una suite en el hotel Sheraton de Quito y planos para la vivienda de un familiar. Calculó ambos trabajos en alrededor de $ 12.000.

Descontando estas sumas, Encalada habría recibido unos $ 380.000 para la remodelación de la casa. Además, en la cuenta de Administraciones Carey del Sur hay pagos, en esa época, a favor de una vidriería y una mueblería nacionales por unos $ 42.000 adicionales. Estos números muestran que la remodelación superó con facilidad los $ 400.000. Y a esto hay que añadir el costo de la compra del inmueble.

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Encalada conoció la vivienda a inicios de 2014. Recordó que Arias lo contactó por recomendación de alguien cuyo nombre evitó dar. La propuesta era que haga los planos para la remodelación, un trabajo simple, pero conforme avanzaron los diálogos terminó rehaciendo los planos originales de la casa y levantando en tercera dimensión la propuesta del nuevo diseño. En medio de la emoción, Arias le propuso que se hiciera cargo de toda la obra.

“Yo nunca pregunté en qué trabajaba él porque como arquitectos es muy incómodo indagar en cosas personales”, afirmó Encalada.

Contó que el proyecto era conservador al principio, pero fueron apareciendo más y más requerimientos. A Arias lo vio muy poco, pues la mayoría del tiempo pasaba en el exterior cumpliendo con su trabajo. Encalada se entendía con la esposa. “Patricia se encargaba de todos los pagos”, mencionó.

Al final, decidieron hacer una remodelación integral. Se quedaron solo con la estructura principal de la construcción: las losas, las columnas y la quinta parte de las paredes. Prácticamente, lo único que se conservó fue la fachada, que no se podía cambiar debido a las normas del conjunto.

Casa que Nilsen Arias Sandoval, exgerente de Comercio Internacional de Petroecuador, vendió a Ítalo Cedeño Cedeño en 2019. Foto: Cortesía. Foto: El Universo

Entre los documentos judiciales hay un contrato entre Encalada y Administraciones Carey del Sur por $ 59.100. El arquitecto aseguró que ese era el presupuesto inicial y que, por eso, se firmó el documento.

Sin embargo, las fechas no concuerdan, pues la remodelación empezó en marzo de 2014 y el acuerdo está fechado ocho meses después, el 14 de noviembre. Además, el monto coincide con una transferencia que él recibió tres días antes, el 11, desde la empresa panameña.

Encalada contó que el banco le solicitó una justificación de los pagos recibidos desde Panamá y que él los sustentó con ese contrato. Nunca más lo cuestionaron, aseveró.

Un cheque para la suegra de Arias

Encalada no duda en afirmar que todo lo que él recibió lo usó en la obra; que con ese dinero compró los materiales, pagó a empleados y a empresas especializadas; que él solo tomó el porcentaje que acordó como honorarios; y, sobre todo, que Arias nunca le pidió que entregara dinero a terceras personas. Pero hace una salvedad.

Aseveró que entre los materiales que debía adquirir estaban los vidrios, pero que luego Arias decidió comprarlos él directamente. Esto explica por qué en la cuenta de Administraciones Carey del Sur hay pagos a una vidriera nacional. Un representante de esta empresa aseveró a este Diario que la Fiscalía designó un perito para revisar esas transacciones y que le han proporcionado a él toda la información.

Por el tema de los vidrios quedó un saldo de unos $ 50.000 a favor del arquitecto. Encalada no recordaba bien el monto. Lo que sí recordaba es que Patricia Romero le pidió que devolviera esa suma a su madre. Por eso, afirmó Encalada, le entregó a la señora un cheque.

Nilsen Arias Sandoval fue gerente de Comercio Internacional de Petroecuador entre 2010 y 2017.

Años después, cuando Encalada estaba poniéndose al día con sus impuestos, se dio cuenta de que no podía descontar esos $ 50.000 en sus declaraciones de impuesto a la renta, pues no contaba con una factura que justificara ese egreso. Esto le provocó una cuantiosa deuda con el Servicios de Rentas Internas, que aún no acaba de honrar.

El arquitecto buscó a Arias y a su esposa para que le ayudaran a arreglar el asunto, pero ya no los encontró. No contestaban sus teléfonos habituales. Arias salió del país a mediados de 2017, cuando dejó su cargo en Petroecuador a inicios del gobierno de Lenín Moreno, y se instaló en Portugal.

“Recibimos presiones de la Presidencia para no sacar a Nilsen Arias”, dice Jorge Cisneros, exgerente de Comercio Internacional de Petroecuador

Encalada supo luego que la casa había cambiado de dueño. Cuando los noticiarios empezaron a informar sobre los sobornos dirigidos a Arias, el arquitecto enmudeció. Dice que no podía creer que ese hombre amable se hubiera inmiscuido en esos asuntos. Tenía una buena impresión de él. Cuenta que, al terminar la obra, Arias invitó a un almuerzo a todos los trabajadores.

La compra de la casa

Cuando ingresó a Petroecuador, en abril de 2010, Arias vivía en una modesta vivienda en un conjunto residencial de El Condado, en el noroccidente de Quito. Según las investigaciones, ese mismo año empezaron a fluir los sobornos.

Tres años después, Arias adquirió la casa de Tumbaco. La escritura de compraventa se celebró en agosto de 2013 y en ella se fijó un valor de $ 122.000. Sin embargo, esa no fue la cantidad que Arias pagó por el inmueble. Los documentos muestran que el valor real habría ascendido a casi $ 220.000.

Casa que Nilsen Arias Sandoval, exgerente de Comercio Internacional de Petroecuador, vendió a Ítalo Cedeño Cedeño en 2019. Foto: Cortesía. Foto: El Universo

En la escritura consta que, para la adquisición, Arias obtuvo un crédito hipotecario del Banco del Pacífico por $ 80.000. Él registró ese préstamo en las declaraciones juradas patrimoniales que presentó a la Contraloría como funcionario público.

Aparte, la esposa de Arias, Patricia Romero, hizo pagos al anterior dueño por un total de $ 23.260, desde cuentas de bancos nacionales. Estas transferencias quedaron registradas en un informe de la Unidad de Análisis Financiero y Económico (UAFE).

Los mayores pagos provinieron de Administraciones Carey del Sur. Desde la cuenta de esta compañía en el Credicorp Bank de Panamá salieron dos transferencias por un total de $ 116.000 a favor del anterior dueño, quien recibió los fondos en el Banco Pichincha Panamá.

En un diálogo con EL UNIVERSO, él señaló que no recordaba el valor exacto de la venta, pero reconoció que bordeó los $ 200.000. “Para efectos personales míos, de dónde se financiaron o de dónde sacaron, con tal que me hayan pagado por la casa, es todo lo que me interesaba”, manifestó.

Arias registró un monto menor en las declaraciones juradas patrimoniales que en esos años entregó a la Contraloría. Valoró esa propiedad en poco más de $ 142.000

Considerando el valor real de la compra y el costo de la remodelación, Arias gastó en esa casa por lo menos $ 600.000. Esta suma supera en mucho el valor por el cual vendió la vivienda en 2019.

Aparece Ítalo Cedeño

Ítalo Cedeño era asesor de la petrolera china Andes Petroleum cuando se interesó en comprar la casa de Nilsen Arias. No pudo dar una entrevista sobre esa transacción, pues se excusó aduciendo que había sido operado de un problema dental. Sí accedió a responder un cuestionario por correo electrónico.

Él afirma que no tenía ninguna relación con Arias y que encontró la vivienda a través de unos agentes inmobiliarios afianzados. La escritura de compraventa se realizó en octubre de 2019, cuando Arias estaba afincado en Portugal.

Cedeño asevera que pagó $ 330.000. Primero hizo transferencias por un total de $ 250.000 desde sus cuentas en bancos nacionales, al momento de firmar el contrato, y luego entregó cheques mensuales de $ 5.000 cada uno hasta completar el valor adeudado. Evitó contestar a qué cuenta de Arias dirigió ese dinero.

QUITO (25-04-2022).- Italo Cedeño fue gerente general de Petroecuador entre enero y agosto de 2022. Foto: El Universo

Consultado sobre cómo financió la vivienda, contestó: “De mis ahorros por más de cuarenta años de trabajo en la industria de petróleo nacional e internacional”. Cedeño sí registró esa propiedad en las dos declaraciones juradas patrimoniales que entregó a la Contraloría en 2022, cuando ejerció como gerente general de Petroecuador.

Según Cedeño, todos los elementos lujosos movibles, desarmables o desmontables habían sido retirados de la vivienda antes de la adquisición. También subraya que el inmueble no tenía ningún impedimento, de cualquier naturaleza, para ser vendida.

La Fiscalía allanó esa propiedad el pasado 10 de febrero, por una denuncia que daba cuenta de una supuesta red de corrupción en la estatal petrolera. También fueron intervenidas las propiedades de otro exgerente general, Hugo Aguiar Lozano, y otros dos altos funcionarios.

Fiscalía allana domicilios del gerente y exgerente de Petroecuador

El caso se mantiene en reserva, en etapa de investigación. Nadie ha sido procesado. La fiscal general, Diana Salazar, dijo a EL UNIVERSO que “se investiga una estructura (...) para negociar el pago de facturas a cambio de comisiones. Lo mismo de siempre”. (I)