Tras una reunión que duró alrededor de seis horas, el Gobierno y las organizaciones sociales aglutinadas en el Parlamento Plurinacional de los Pueblos no lograron ponerse de acuerdo sobre el precio de los combustibles y se dieron quince días de plazo para volver a reunirse.

El presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), Leonidas Iza, manifestó que hay mucho avance, pero “no hay acuerdo”. Esta organización propuso congelar el precio de los combustibles a $ 1,50 el diésel y a $ 2,10 el galón de gasolina extra.

Las propuestas de la Conaie giran en torno a seis puntos: precio de combustibles, moratoria en el pago de créditos productivos, el bajo precio de los productos campesinos, el problema minero, la flexibilización laboral y la aplicación de los derechos colectivos.

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A la reunión, que arrancó a las 11:00, asistieron alrededor de 60 dirigentes de la Conaie, la Feine, la Fenocin y el Frente Popular.

En tanto, la ministra de Gobierno, Alexandra Vela, dijo que se alcanzaron tres acuerdos de seis puntos: créditos, manejo y control de precios de insumos agrícolas y el control del contrabando, y sobre la educación bilingüe intercultural; en dos de los 6 puntos hay aún diferencias: minería y petróleo; y en un punto, el del precio de los combustibles, con el que hay que “hacer una revisión”.

“Hay varias propuestas sobre precios (...) el Gobierno va a analizar y revisar las propuestas con responsabilidad y va a determinar lo que tenga que determinar (...) Hay apertura de organizaciones para que se analicen diferentes posibilidades, el Gobierno considerará a cada una de ellas en un lapso de entre dos y tres semanas”, indicó Vela.

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En declaraciones ofrecidas alrededor de las 13:30, el vocero presidencial, Carlos Jijón, ratificó que la rebaja del precio de los combustibles es el “principal planteamiento” de las organizaciones, que el presidente Guillermo Lasso entiende el problema, que le gustaría bajar el precio, pero que las circunstancias actuales del país no lo permiten.

Antes de la cita con el presidente Guillermo Lasso, el dirigente indígena Leonidas Iza dijo haber sido ‘insultado’, pero que tenía ‘espíritu democrático’

El Gobierno ha dado muestras de apertura para ceder en otras cosas como, por ejemplo, la condonación de los créditos de los pequeños agricultores con BanEcuador y el respeto a los precios de sustentación del saco de arroz, pedidos realizados por organizaciones indígenas y arroceras, respectivamente, según mencionó Jijón.

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Esta es la segunda reunión del Gobierno con la dirigencia de la Conaie, la primera fue el pasado 4 de octubre y concluyó sin un acuerdo sobre los combustibles, el tema más álgido, y por el que esta organización y otras organizaciones se movilizaron y bloquearon algunas vías, antes del feriado por el Día de los Difuntos.

Para esta segunda reunión, la Conaie pidió al Gobierno ampliar la invitación a otras organizaciones y también que el encuentro sea público. El Gobierno accedió en el primer punto y Lasso junto a varios ministros se reunieron con alrededor de 60 dirigentes indígenas y sociales.

Desde las 11:00, varios dirigentes empezaron a ingresar al Palacio de Carondelet que, junto a la plaza Grande, fueron cercados con vallas y resguardo policial y militar para que el resto de manifestantes que les acompañaban no logren acceder a la Presidencia.

A su ingreso, Nelson Erazo, dirigente del Frente Popular (FP), ratificó que los sindicatos esperan que el Gobierno derogue los dos últimos decretos ejecutivos sobre los combustibles: el del sistema de bandas firmado por el expresidente Lenín Moreno y el firmado por el presidente Guillermo Lasso en el que congela el precio de la gasolina extra y del diésel, con un incremento.

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“La paz depende del Gobierno (...) pedimos el congelamiento del precio de los combustibles al mes de junio”, dijo Erazo, al referirse a la posibilidad de retomar las movilizaciones si no se alcanza un acuerdo con el Ejecutivo. El dirigente pidió que se invite al Frente Unitario de Trabajadores (FUT) para la próxima reunión.

Más tarde, la dirigencia de la Conaie ingresó al Palacio, la seguridad presidencial impidió que la prensa pueda entrevistar a su presidente, Leonidas Iza, y lo cercó, mientras lo dirigían al segundo piso de Carondelet. Se produjeron altercados con empujones y gritos de la seguridad y un funcionario de la Secretaría General de Comunicación contra los periodistas en los pasillos.

Minutos después, el secretario general de Comunicación de la Presidencia, Eduardo Bonilla, y el jefe de la Casa Militar Presidencial, Pablo Almeida, ofrecieron disculpas a los representantes de los medios de comunicación. En la tarde, la Secretaría General de Comunicación (Segcom) emitió un comunicado diciendo que “extiende una disculpa por los incidentes suscitados al ingreso” de Iza y que “lo acontecido obedece a un error de coordinación del personal, por lo que se tomarán los correctivos necesarios para garantizar el ejercicio periodístico”.

Al iniciar la reunión, el presidente Guillermo Lasso dijo que el diálogo y la resolución de diferencias en un ambiente de paz y tranquilidad, sin exponer el patrimonio público y privado, son fundamentales en una sociedad democrática y republicana. Vela ratificó estos conceptos y la apertura del Gobierno al diálogo, al final de la cita. (I)