Carlos Jijón, vocero de la Presidencia de la República: Está en la cancha de la Asamblea alejar al país de una posibilidad de muerte cruzada

Este fin de semana, el presidente de la República, Guillermo Lasso, develó en dos cartas lo que serían posibles actuaciones irregulares de actores políticos como el excandidato presidencial de la Izquierda Democrática (ID), Xavier Hervas y de cinco asambleístas de Pachakutik (PK), como parte del debate de la Ley de Inversiones que fue archivada por la Asamblea Nacional el 24 de marzo de 2022. Estas están en manos del Servicio de Rentas Internas y de la Unidad de Análisis Financiero (UAFE), así como de la Fiscalía General del Estado para su investigación. El vocero de la Casa de Gobierno, Carlos Jijón, aclaró que estas denuncias contarían con testimonios y testigos para dar a conocer a las autoridades que se les habría ‘chantajeado’ a cambio de votos, como lo anotó Lasso. “El Gobierno está contando la verdad, lo que sabe, lo que ha visto y lo que ha escuchado. Es obligación del Gobierno contarlo”, indicó Jijón, en un breve diálogo con este Diario. Además, recalcó que estas revelaciones no significan que hay una ruptura en el mecanismo del diálogo con la función Legislativa, pero cree que las bancadas deberán evaluar en lo interno la actuación de sus coidearios.

¿Cómo sucedieron estos hechos y por qué no se denunciaron en los momentos en los que se estaban pidiendo esos supuestos beneficios económicos?

No conozco los detalles de las reuniones. Conozco que hubo reuniones de los legisladores y funcionarios del Gobierno, que hubo reuniones con todas las bancadas para explicar, para discutir sobre la propuesta de Ley de Inversiones y dentro de esas conversaciones ha ocurrido lo que el presidente de la República ha narrado. ¿Por qué no se lo hizo de inmediato? Porque el Gobierno tenía que evaluar cómo lo iba a hacer, qué es lo que ha estado pasando, reflexionar sobre lo que iba a hacerse. Esto no ha sido un impulso de nadie, sino una reflexión al interior del Gobierno y de cómo se lo iba a hacer.

Pero la denuncia se produce después de que se negó y archivó el proyecto y no en el momento en que se habrían dado esos hechos.

Antes de hacer una acción tan grave, el Gobierno tiene que reflexionar la manera de hacerlo. Esto ha sido una decisión del Gobierno que es responsable, meditada y se llegó a la conclusión de que debía hacerse la denuncia y contarle a la gente lo que había pasado y no guardarse. En todo caso, esto se ha hecho días después de lo que ha ocurrido, no después de un mes (por ejemplo).

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¿Cuentan con las pruebas que permitan sostener estas revelaciones en las investigaciones que llevará a cabo la Fiscalía?

El Gobierno ha contado lo que sabe, lo que le consta. Hay testimonios, hay testigos, hay personas que estaban en estas conversaciones. El Gobierno está contando la verdad, lo que sabe, lo que ha visto y lo que ha escuchado. Es obligación del Gobierno contarlo.

¿Esta exposición pública de las supuestas actuaciones legislativas podría concluir en un rompimiento de las relaciones con la función Legislativa, con los bloques?

No, de ninguna manera. El Gobierno ha denunciado la actitud de algunas personas. Eso va a depender de la actitud de los bloques, porque los bloques pueden investigar lo que ha pasado, investigar a las personas que han sido señaladas, sancionarlas y llevar una posición correcta. El bloque de Pachakutik puede investigar a estos asambleístas que el Gobierno ha señalado y debe tomar una posición. Lo correcto sería que estas personas sean separadas de sus puestos y que Pachakutik continúe de una manera normal, trabajando, teniendo una relación normal con el Gobierno. Todo va a depender de la actitud de PK y también va a depender de la actitud de la Izquierda Democrática, los dos deben y están obligados a realizar una investigación interna de lo que ha ocurrido y tomar las medidas necesarias. Si Pachakutik y la Izquierda Democrática asumen con responsabilidad estas denuncias, investigan a estas personas, las sancionan, el Gobierno podrá seguir relacionándose con ellos y trabajando de manera normal. Ese es el camino que todos esperaríamos que se debe seguir. Deben investigar, reflexionar sobre lo que está pasando y actuar con prudencia y decencia.

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¿Para evitar estas críticas a la política, de que existiera un ‘hombre del maletín’ para conducir la relación entre el Gobierno y el Legislativo?

El Gobierno es transparente, rechaza las prácticas corruptas y dentro de esa política de honestidad y anticorrupción se ha revelado lo que ha ocurrido en medio de estas conversaciones.

¿Se harán más revelaciones en cuanto a otros legisladores o actores políticos involucrados en estos actos denunciados?

El Gobierno ha empezado un proceso de contar lo que ha pasado, y continúa evaluando la situación.

Es decir, ¿no se descarta que sean más los involucrados?

No, yo no puedo descartar que el Gobierno haga una denuncia adicional. Tampoco lo puedo asegurar.

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La presidenta de la Asamblea, Guadalupe Llori, llamó al Gobierno al diálogo para evitar la aplicación de una posible muerte cruzada por la desestabilización económica y política que esto implicaría. ¿Hay disposición del Ejecutivo de impulsar estos mecanismos?

El Gobierno está siempre abierto al diálogo, no se ha adoptado una decisión de muerte cruzada. El Gobierno está consciente de que es una herramienta de última instancia para solucionar una crisis política que conduzca a la desestabilización. En la medida que la Asamblea actúe de manera responsable, esa posibilidad se alejará. Entonces, está en la cancha de la Asamblea alejar al país de una posibilidad de muerte cruzada. Mientras la Asamblea se mantenga en una política de estabilización democrática, de respeto a las instituciones, de respeto a la ley, la muerte cruzada no será una opción. Pero si la Asamblea se conduce por unos caminos de llegar a una crisis política y económica, podrá llegar el momento en el que la muerte cruzada sea la única alternativa que le quede al Gobierno. (I)