En las organizaciones sociales hay inquietud porque no se estarían cumpliendo los acuerdos a corto plazo llegados con el Gobierno durante los tres meses de diálogo, por lo que se preparan acciones de protesta. A esto se une la posibilidad de que la Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE) ya no acompañe el proceso de seguimiento y evaluación de esos 218 acuerdos que dejaron los denominados ‘diálogos por la paz’ después del paro nacional de junio pasado.

Once días han transcurrido desde que se cerraron oficialmente las diez mesas de diálogos entre autoridades de la Función Ejecutiva y de los tres movimientos sociales de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), del Consejo de Pueblos y Organizaciones Indígenas Evangélicos del Ecuador (Feine) y de la Confederación Nacional de Organizaciones Campesinas, Indígenas y Negras (Fenocin), cuya etapa de seguimiento de los acuerdos alcanzados no avanza con un cronograma regular y con advertencias de que iniciarán movilizaciones.

El seguimiento y evaluación de los acuerdos entre Gobierno y movimientos, en una fase de planificación

El presidente de la Fenocin, Gary Espinoza, anunció que para la primera quincena de noviembre se efectuarían cierres de carreteras en Los Ríos, Guayas y Esmeraldas, en reclamo al presidente de la República, Guillermo Lasso, de que cumpla los compromisos dados en estas mesas de trabajo, esencialmente en materia crediticia.

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Espinoza se refiere a los resultados de la mesa de banca pública y privada, que fue la primera en instalarse en julio pasado y que dejó entre sus consensos la condonación de deudas en instituciones públicas, subsidiar la urea, créditos al 1 % de interés, entre otros.

Según el dirigente esmeraldeño, pese a las conversaciones, el jefe de Estado no ha cumplido con estos puntos por lo que en las calles exigirán su ejecución.

“Estamos en reuniones y esperamos que la primera quincena de noviembre se dé, pero debemos ponernos de acuerdo con las demás organizaciones y hacer una acción de lucha. Será una medida preventiva a ver si el presidente se sensibiliza a cumplir con los acuerdos”, señaló en declaraciones de prensa.

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Su temor es que los consensos sean “un saludo a la bandera”, pues el ofrecimiento del régimen había sido firmar el acta de condonación de deudas hasta $ 10.000, como lo recoge la ley de reforma tributaria el 15 de agosto y “vemos que no hay la intención de cumplir”, aseveró Espinoza.

“Siempre he dicho que el papel aguanta todo. Lo que nos preocupa es el incumplimiento, porque ya van los tres meses y no hay condonación de deudas, tampoco ha empezado el mejoramiento de los caminos vecinales. Estamos viendo que no hay otra alternativa (hacer protestas), es dolorosa, pero no hay otra”, manifestó en una entrevista con radio Notimundo.

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Aseguró que la medida de hecho “no es nada del otro mundo”, pero que por el momento está recorriendo provincias y reuniéndose con las organizaciones de base evaluando la situación para con ello determinar si realizan “una medida de presión”.

En tanto, la Conaie y la Feine mantienen la prudencia sobre este tipo de anuncios, pues en noviembre realizarán sus asambleas y congresos nacionales en los que evaluarán lo tratado con el Gobierno.

En medio de esta evaluación interna, las organizaciones sociales evidenciaron su preocupación por la posibilidad de que la Conferencia Episcopal Ecuatoriana no acompañe la etapa de evaluación y seguimiento de los 218 acuerdos que se habrían suscrito.

La Conferencia, presidida por monseñor Luis Cabrera en conjunto con el secretario, David de la Torre, promovió la firma del Acta de la paz que permitió acabar con los 18 días del paro nacional y acompañó como ‘garante’ las diez mesas de diálogo.

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La vicepresidenta de la Conaie, Zenaida Yasacama, confirmó esa posibilidad, aunque evitó explicar en qué contexto la Conferencia comunicó esta decisión.

Justamente este 25 de octubre, las delegaciones de los colectivos sociales, del régimen y de la Iglesia católica preveían mantener una reunión para retomar el trabajo de la Comisión de Evaluación y Seguimiento que se integró el 14 de octubre en el acta final de los diálogos.

Yasacama contó que recibieron la información de que la Conferencia no quería seguir siendo parte de este proceso, lo que es una “preocupación”, pero las organizaciones sociales habían pedido que desista de esa intención, que “siga colaborando”.

La ‘comisión de seguimiento’ a los compromisos asumidos por el Gobierno sería esencial para evitar nuevas manifestaciones

“Ellos desde un inicio asumieron esta responsabilidad y quisiéramos que asuman hasta finalizar este proceso. No podemos bajar del barco y dejar… Ellos han manifestado que el diálogo no puede quedar en la nada”, opinó.

De igual forma, Enrique Washca, dirigente de la Feine, reveló que la aspiración de que la Conferencia se mantenga como garante del diálogo es para que el Gobierno cumpla los ofrecimientos.

“Aspiramos a que la Conferencia esté en la voluntad de querer avanzar, de que haya la voluntad de acompañar el proceso, para que no se complique el diálogo”, afirmó.

Este hecho se preveía resolver en la reunión de este martes, por lo que por el momento, la Conferencia Episcopal continuaba apoyando con sus instalaciones para que las delegaciones de las partes continúen su trabajo. (I)