Cuando Julie Chávez Rodríguez tenía 9 años de edad fue arrestada por la policía mientras distribuía panfletos que alertaban sobre los peligros del uso de pesticidas durante unas protestas a las afueras de un supermercado.

Ahora, 35 años después de aquel episodio, Chávez es la jefa de la campaña para la reelección del presidente Joe Biden.

Pero ni su ascenso político ni aquella detención a una edad tan temprana deberían causar sorpresa, pues Chávez es la nieta del histórico líder campesino y activista por los derechos civiles César Chávez, quien luchó en las décadas de 1960 y 1970 por mejores condiciones de vida para los trabajadores del campo en EE.UU. y es reconocido como un ícono en círculos de izquierda y sindicales.

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BBC Mundo te cuenta quién es esta mujer considerada la latina más poderosa de la Casa Blanca.

Del activismo a la política

Criada en el Valle Central de California, Julie Chávez asistió a mítines y participó desde niña en actividades comunitarias junto a sus padres, Linda Chávez y Arturo Rodríguez, y sus abuelos, César y Helen Chávez.

Tras graduarse en el año 2000 en Estudios Latinoamericanos en la Universidad de California en Berkeley, Chávez se incorporó a trabajar como directora de programas en la Fundación que lleva el nombre de su abuelo fallecido en 1993.

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En 2008 se unió como voluntaria a la campaña presidencial de Barack Obama en Colorado.

Poco después, tras el triunfo electoral de Obama, se haría cargo de una iniciativa para la juventud en el Departamento del Interior, antes de ser reclutada para trabajar en la Oficina de Participación Pública de la Casa Blanca en temas relacionados con la inmigración y con la comunidad latina.

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Años más tarde, fue nombrada asistente especial del presidente Obama.

A finales de 2016, poco antes de que Obama abandonara la Casa Blanca, Chávez se convirtió en directora estatal de la campaña de Kamala Harris por un puesto en el Senado por California.

Kamala Harris puso a Julie Chávez al frente de su campaña electoral en 2019. GETTY IMAGES Foto: BBC Mundo

Luego, cuando Harris se postuló como precandidata presidencial para los comicios de 2020, Chávez se convirtió en su directora nacional de campaña y, posteriormente, en su jefe de gabinete itinerante.

Una vez que Harris abandonó la carrera presidencial, Chávez se unió a la campaña de Biden como responsable de contacto con la comunidad latina.

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En 2021, Biden la puso al frente de la oficina de asuntos intergubernamentales, pero en junio de 2022 -en anticipación a las elecciones legislativas de mitad de periodo- la designó como asesora principal, convirtiéndola en la latina de mayor rango en la Casa Blanca.

Según reseñó la agencia AP, en los últimos dos años Chávez y su equipo han ayudado a los gobiernos estatales, locales y tribales con sus solicitudes de recursos federales, lo que incluye la distribución de ayudas para luchar contra la pandemia de covid-19.

Entre César y Julie Chávez

El primer día que llegó a la Casa Blanca, Biden colocó un busto de César Chávez en la Oficina Oval.

Biden junto al busto de César Chávez en la Oficina Oval. GETTY IMAGES Foto: BBC Mundo

El mandatario apoyó las luchas de su abuelo por mejorar las condiciones de vida de los trabajadores rurales y, según dijo Julie Chávez a la agencia AP, ambos hombres estaban influenciados por su fe católica.

Chávez dijo que se sintió sobrepasada la primera vez que vio el busto de su abuelo en el despacho presidencial.

Y es que César Chávez es una figura que dejó huella en la izquierda estadounidense.

“Sí se puede”, el lema con el que arengaba a los trabajadores que asistían a los mítines del sindicato de trabajadores rurales que fundó en 1962 -el United Farm Workers labour Union-, es igual al que usaría en inglés Barack Obama en su campaña presidencial de 2008.

Pero Julie Chávez no parece haberse valido de su apellido para hacer carrera política, al menos según se desprende de una anécdota que compartió con la prensa estadounidense Valerie Jarrett, quien fue la jefa de Chávez en la Oficina de Participación Pública de la Casa Blanca.

De acuerdo con Jarrett, cuando en 2012 Obama inauguró el monumento nacional en honor a César Chávez en California, muchos descendientes del líder sindical fueron invitados a participar en el acto con el mandatario.

Pero Julie Chávez se resistió inicialmente a fotografiarse con sus familiares y Obama, alegando que no le correspondía porque estaba allí como personal de la Casa Blanca y no como descendiente de Chávez.

Exfuncionarios como Cecilia Muñoz, quien encabezó el Departamento de Relaciones Intergubernamentales durante el gobierno de Obama, han destacado que Julie Chávez ha llegado hasta allí por sus grandes habilidades y por su “profunda integridad”.

En la actualidad, Chávez forma parte de un grupo de latinas que trabajan en la Casa Blanca asesorando a Biden en diversas materias y se ha convertido en una de las asesoras de mayor confianza del mandatario.

Tanto es así que ahora fue escogida como gerente de su campaña, en lugar de Jen O’Malley Dillon, quien estuvo al frente de la exitosa campaña de Biden en 2020, y de la hermana del mandatario, Valerie Biden Owens, quien había dirigido sus campañas anteriores. (I)