Stella Moris, la prometida del fundador de WikiLeaks, Julian Assange, pidió el martes al gobierno británico que impida su extradición a Estados Unidos, que lo quiere juzgar por espionaje a raíz de una masiva filtración de documentos clasificados.

Los partidarios del australiano vieron esfumarse el lunes una de sus últimas esperanzas de evitar la extradición cuando el Tribunal Supremo británico se negó a considerar su recurso contra la entrega a la justicia estadounidense.

El caso se remitirá ahora a la ministra británica del Interior, Priti Patel, última responsable de aprobar cualquier extradición.

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Subrayando que “el destino de Julian está ahora en manos de la ministra del Interior”, Moris insitió en un comunicado en que “este es un caso político y ella puede ponerle fin”.

“Hace falta valor político, pero esto es lo que se necesita para preservar una sociedad abierta que proteja a los editores de la persecución extranjera”, afirmó.

Assange, de 50 año, está procesado en Estados Unidos por la publicación a partir de 2010 de más de 700.000 documentos clasificados sobre las actividades militares y diplomáticas de Estados Unidos, especialmente en Irak y Afganistán.

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De ser declarado culpable de todos los cargos podría ser condenado a hasta 175 años de cárcel, en un caso que sus partidarios denuncian como un grave ataque a la libertad de prensa.

Encarcelado en una prisión de alta seguridad cerca de Londres desde hace casi tres años, el australiano fue detenido por la policía británica en abril de 2019 en la embajada de Ecuador en Londres, donde se había refugiado siete años antes vulnerando las condiciones de su libertad bajo fianza.

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Ya entonces temía ser extraditado a Estados Unidos desde Suecia, donde se enfrentaba a cargos de violación que fueron abandonados desde entonces.

Moris, una abogada sudafricana con la que Assange tuvo dos hijos en secreto durante sus años en la legación ecuatoriana, anunció el domingo que la pareja recibió permiso para casarse el 23 de marzo en la cárcel londinense. (I)