El empresario colombo-venezolano Alex Saab, muy cercano al Gobierno de Venezuela y presunto testaferro del presidente Nicolás Maduro, comparecerá este lunes en su primera audiencia ante la justicia estadounidense tras haber sido extraditado para responder de acusaciones de lavado de activos.

Además de Saab, la extesorera nacional de Venezuela Claudia Patricia Díaz Guillén también deberá enfrentarse a la justicia estadounidense, luego de que España aceptara entregarla.

La Audiencia Nacional española aprobó la extradición a Estados Unidos, que la reclama por blanqueo de capitales y organización criminal por favorecer al empresario Raúl Gorrín en una trama de cambio de moneda extranjera.

Publicidad

Ambos procesos ponen al chavismo en una compleja situación y la extradición de Saab lo llevó a suspender los diálogos que mantenía con la oposición en México, lo que provocó en una fuerte condena en contra del gobierno de Nicolás Maduro, recoge Infobae.

Otra reacción del chavismo fue el devolver a prisión a seis exdirectivos de la compañía venezolana Citgo, filial de la petrolera estatal Pdvsa en Estados Unidos, que habían sido condenados por corrupción el año pasado y puestos bajo arresto domiciliario.

El Departamento de Estado de EE.UU. aseguró que “seguirá trabajando para lograr la liberación de los estadounidenses detenidos de forma injusta en Venezuela”.

Publicidad

En Caracas se han colocado carteles de apoyo al empresario colombo-venezolano Alex Saab. Foto: EFE

La cuarta ronda del diálogo estaba pautada para comenzar este domingo, pero el líder de la delegación oficialista y de la Asamblea Nacional de Venezuela, Jorge Rodríguez, suspendió el sábado la negociación de forma indefinida.

Sobre Saab, no ha trascendido hasta ahora información oficial alguna de dónde está detenido, aunque por anteriores casos de extraditados destacados, como el expresidente panameño Ricardo Martinelli, es probable que esté en el centro de detención anexo a los tribunales federales del centro de Miami.

Publicidad

El gran interrogante de esta fase del proceso judicial es si Saab, nacido en Colombia hace 49 años, colaborará con la Fiscalía a cambio de una reducción de condena o se someterá a juicio.

El empresario llegó el sábado a Estados Unidos desde Cabo Verde después de haber pasado más de un año detenido en ese país insular en virtud de una orden de captura emitida a través de Interpol por EE. UU.

El régimen venezolano, que considera que Saab fue víctima de un “secuestro” y ha reaccionado a la extradición rompiendo unilateralmente el diálogo con la oposición que se llevaba a cabo en México, hizo lo imposible por evitar que fuera entregado a EE. UU.

Además de pelear judicialmente en Cabo Verde, le dio la nacionalidad venezolana, alegó que cuando fue detenido viajaba a Irán para cumplir una misión oficial y tenía inmunidad diplomática y lo convirtió en representante en ausencia en el diálogo.

Publicidad

En Estados Unidos sus abogados se han centrado en demostrar que la justicia estadounidense no tiene jurisdicción para juzgarle y en que no era un prófugo cuando fue detenido en junio de 2020 en Cabo Verde, pero esos argumentos han sido desestimados en primera instancia.

La extradición ha causado alegría en la comunidad venezolana y en el exilio, que lo ve como un “golpe certero” a la “tiranía” de Nicolás Maduro, como afirmó a Efe José Antonio Colina, presidente de Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio (Veppex).

“La extradición de Alex Saab hacia los Estados Unidos es un motivo de alegría para todos los venezolanos. Trataremos de asistir a sus audiencias y sentir la buena sensación de ver a un corrupto sometido a la justicia!”, escribió Colina en Twitter.

Claudia Patricia Díaz Guillén, en una imagen de archivo. Foto: EFE

Una funcionaria del Departamento de Estado, confirmó que Saab comparecerá este lunes a las 13:00 horas ante el juez federal John J. O’Sullivan, del Distrito sur de Florida, que se encargará del “recibimiento”, al que los periodistas podrán acceder por zoom.

Saab está acusado de siete cargos de lavado de dinero y uno más de conspiración para cometer ese delito y además está sujeto desde mayo de 2019 a sanciones de la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC) del Departamento del Tesoro de EE.UU.

Los fiscales consideran que lavó más de $350 millonespara pagar corruptelas de Maduro a través del sistema financiero estadounidense

Congresistas estadounidenses como la republicana María Elvira Salazar, representante por el sur de Florida, el embajador de Venezuela en Washington, Carlos Vecchio, que responde a Juan Guaidó, al que EE.UU. considera presidente interino de Venezuela, dirigentes opositores, exiliados y ciudadanos venezolanos radicados en EE.UU. han manifestado su satisfacción por la extradición.

En tanto, en el caso de Díaz, según la reclamación del Tribunal Federal de Distrito Sur de Florida (EE.UU.), desde 2008 a 2017 Gorrín Belisario, junto a Díaz Guillén y su marido Adrián Velásquez Figueroa participaron con otros en un “estratagema corrupta” en relación al cambio de moneda extranjera efectuado por el gobierno venezolano a cambio de sobornos.

Guillén es conocida como la enfermera del fallecido presidente venezolano Hugo Chávez y su marido, que fue su guardaespaldas, tiene pendiente que la Audiencia Nacional se pronuncie también sobre su extradición por los mismos hechos.

En 2019 la Audiencia Nacional española rechazó extraditar a Venezuela a Guillén y a su marido, así como a un contable de la petrolera estatal PDVSA, atendiendo a la situación que atraviesa el país, lo que consideró que ponía en peligro su integridad.

Ahora, acepta la entrega a Estados Unidos de la exresponsable del Tesoro venezolano a la luz de la documentación aportada por las autoridades de ese país el pasado año.

Según esa documentación, Gorrín pagó cientos de millones de dólares para asegurarse el derecho de participar en transacciones de cambio de moneda extranjera que le reportaron unas ganancias de cientos de millones de dólares.

En su resolución, los magistrados españoles rechazan los argumentos de la reclamada para oponerse a la extradición, entre ellos que ya está siendo investigada por los mismos hechos en España, así como que el haber obtenido la nacionalidad española en abril de 2021 sería causa para denegar la entrega.

Respecto al primero de los argumentos, los jueces concluyen que no se trata de los mismos hechos por los que se la investiga en este país y, respecto a la nacionalidad española como causa de denegación, así como su arraigo, consideran que no se dan los factores para rechazar la extradición de nacionales, como son la ponderación sobre la gravedad y la vinculación o arraigo en el país. (I)