Melissa Lucio tiene 14 años cumpliendo condena en la prisión de Mountain View, en Gatesville, Texas en Estados Unidos. Esta mujer fue declarada culpable del asesinato de su hija de dos años, muerte que asegura no la causó y por la que podría ser ejecutada.

Mariah Elizabeth Álvarez era una de los 12 hijos que en total tuvo Melissa Lucio y su esposo Robert Antonio Álvarez. La menor cayó por las escaleras mientras la pareja realizaba la mudanza para dejar un departamento de 2 habitaciones en el que vivía la familia. Tras la caída, su madre solo detectó sangre entre sus dientes, pero la pesadilla llegó cuando la niña se quedó dormida y no despertó más.

El 27 de abril era la fecha pautada y la mexicana se convertiría en la primera latina en ser ejecutada por pena de muerte, si su defensor no lograba la suspensión de la medida.

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La BBC Mundo aclaró que su abogado se encargó de preparar una solicitud de clemencia con la que logró aplazar su muerte, mientras las autoridades someten a revisión su caso nuevamente, debido a que alegan que la mujer fue sometida a declaraciones bajo presión. (I)