Aunque no es la primera vez que los Obama han vuelto a la casa presidencial estadounidense, sí fue una ceremonia amena porque Barack Obama bromeó y realizó “declaraciones picantes”, como calificó posteriormente Michelle.

Entre vítores, bromas y una dulce nostalgia, el expresidente estadounidense Barack Obama (2009-2017) y la exprimera dama Michelle Obama revelaron este miércoles en la Casa Blanca sus retratos oficiales, que esperan que sirvan de inspiración para las nuevas generaciones.

Más de cinco años después de pasar el relevo a Donald Trump, los Obama reaparecieron en la mansión presidencial para reivindicar su legado como la primera y única pareja presidencial afroamericana que ha gobernado Estados Unidos.

Publicidad

Entre otras cosas, Barack Obama bromeó sobre lo mucho que echa de menos el avión presidencial Air Force One y sobre la sorpresa que se ha llevado al ver a algunos de sus antiguos asesores, muy jóvenes hace años y que ahora desempeñan cargos de responsabilidad, algo que explica “algunas de esas canas”, dijo Obama entre risas.

"Me hace feliz ver que formaron sus propias familias. Pero, -añadió con tono burlón- estoy un poco decepcionado porque no he oído que nadie haya llamado a su hijo Barack o Michelle. Aunque todavía hay tiempo".

Con canas y arrugas

El exmandatario también hizo bromas sobre su retrato, pintado por Robert McCurdy, un artista conocido por sus pinturas realistas que casi parecen fotografías.

Publicidad

"Lo que me gusta del trabajo de Robert es que pinta a la gente exactamente como son, ya sea para mejor o para peor. Captura todas las arrugas de tu cara, las dobleces de tu camisa, y como verán no quiso esconder ninguna de mis canas y rechazó mi petición de hacer que mis orejas parecieran más pequeñas", se rio Obama.

El retrato lo muestra sobre un fondo blanco vestido con un traje negro, una corbata gris y las manos en los bolsillos.

Publicidad

Ya con tono más serio, Obama expresó su deseo de que esos retratos sirvan para recordar al pueblo estadounidense que los presidentes y las primeras damas "también son seres humanos" que tienen buenos y malos días y que, a veces, por la noche pierden el sueño preguntándose si hicieron lo correcto.

"Cuando las nuevas generaciones anden por estos pasillos y vean estos retratos, espero que ellos puedan tener una idea más honesta de quienes éramos Michelle y yo. Y espero que entiendan que, si nosotros pudimos llegar hasta aquí, entonces quizás ellos también pueden. Ellos también pueden hacer cosas increíbles", prometió.


El expresidente de EE.UU. Barack Obama observa la imagen de su esposa, Michelle Obama, durante el acto en el que se revelan sus retratos oficiales en la Casa Blancos, este 7 de septiembre de 2022. EFE/Al Drago/Pool Foto: AL DRAGO / POOL

En Michelle destacó el color de las joyas

En contraste con el sobrio retrato de Obama, la pintura de su esposa muestra los colores rojos y azules de las joyas, una característica diferencial de su autora, Sharon Sprung, quien manipulando las capas de la pintura busca reflejar la complejidad de la vida real en sus obras.

Publicidad

En el retrato, la exprimera dama aparece en un vestido de gala azul claro y sentada en un sofá rojo con una pared rosa.

Recordando sus orígenes humildes, Michelle Obama reconoció que todavía le resulta “un poco raro” estar en la Casa Blanca.

“Una chica como yo se supone que nunca debería estar ahí al lado de Jacqueline Kennedy y Dolley Madison. Nunca debería haber vivido en esta casa y nunca debería haber sido primera dama”, reflexionó Michelle Obama, quien habló de la necesidad de crear un futuro que “incluya a todos los estadounidenses”.

En su discurso, la exprimera dama reconoció también el poder de los símbolos y de las tradiciones que sirven para mantener la democracia estadounidense, incluida la transferencia pacífica del poder. (I)