Por Sonia Yánez Blum (Twitter: @soniayanezblum)

El crimen de María Belén Bernal, lamentablemente, es el reflejo fiel -en digital y en los medios- de la falta de criterio y coherencia en las instituciones ecuatorianas.

Pone visible el falso discurso de la protección institucional por encima de las personas. O como decían las abuelas: no digan nada para que el vecino no se entere.

Publicidad

Cuántos crímenes quedan en silencio para no pasar vergüenza, para proteger a los iguales o por conveniencia de un mal concepto de la reputación.

Han pasado doce días y solo una persona detenida: una cadete mujer. En esta noticia, las mujeres son las trágicas protagonistas. Y todas ellas han sido denigradas y atacadas en diversos bandos.


Publicidad

En el crimen de Bernal y la huida de su esposo, Germán Cáceres, las redes sociales se convirtieron en el escenario de pugnas y también en la voz de quienes en otros tiempos quedarían relegados. El hijo de María Belén creó una cuenta de Twitter la semana pasada y publicó una foto de Cáceres. “Buenas noches a todos, ayúdenme a encontrar a mi mamá. La última persona que estuvo con ella fue mi padrastro Germán Cáceres”. Hasta este jueves había sido retuiteado más de 12.900 ocasiones.

María Belén Bernal nos hizo comprender que no hay sitio seguro para las mujeres en Ecuador, como un gris recuerdo, su último video en TikTok con más de un millón de reproducciones, cuyo mensaje central era para motivar que las mujeres no se queden calladas. Rodeada de policías, ninguno acudió ante el grito de ayuda. ¿Llamar al 911? Ni siquiera pensemos en el resultado.

Publicidad

Errores de criterio al accionar y al declarar

El torbellino, el silencio y la indignación se acrecientan. Las crisis se sobredimensionan ante la pasividad de quienes llevan el poder y el orden en las instituciones y organizaciones.

Si hay algo que este Gobierno ha cumplido desde el primer día es fallar en el primer mensaje. Se equivoca en los tiempos, en el tino y el tono del mensaje.

Lo que le pasó a María Belén Bernal solo merece una primera respuesta inmediata: “no descansaremos hasta encontrarla y sancionar a los responsables y sus encubridores”. Ese era el mensaje central.

En cualquier crisis, cuando empiezas tu discurso con el NOSOTROS, tuit o declaración a medios, no sirve de nada. “Cumplimos nuestro trabajo”, no era la opción.

Publicidad

¿Por qué falla la estrategia de comunicación?

Para quienes han trabajado en comunicación de gobierno o institucional llega siempre el momento, en que si el vocero no respeta los lineamientos ni hace caso a las recomendaciones, debe ser firme y no ceder, renunciar antes que ceder, o aceptar hacer lo que quieren en la institución, asumiendo que su criterio ya no será respetado.

En las fuerzas del orden aún existe un pensamiento bastante tradicional respecto a los flujos de comunicación, mensajes, el espíritu de cuerpo y al ego institucional. Todo juntos se convierten en una mala receta.

Estas son las declaraciones, sobre María Belén Bernal, que han puesto al ministro Patricio Carrillo en el ojo público

“-Jefe este es el texto.

- Pero ahí nos hace ver culpables. Eso no se dice. No podemos pedir disculpas si ni siquiera ha pasado y hace daño a la institución”.

A pesar de ser un diálogo imaginario es una situación más común de lo que parece y que produce una crisis más grande de la que se imagina.

Los errores que en lugar de calmar, enredaron e indignaron

  • El 16 de septiembre a las 9 de la noche: recién el primer mensaje oficial del presidente Lasso. María Belén desapareció el 11 de septiembre.
  • 15 de septiembre apareció el primer tuit del ministro Patricio Carrillo alusivo al tema, habían pasado más de cuatro días de la desaparición de María Belén, de silencio en las redes, mientras se publicaban temas sobre consulta, posible juicio político y campañas institucionales eran lo más importante.
  • Conocer que el ministro se fue de viaje de vacaciones (matrimonio de su hija) en medio de la crisis. Cuatro días, era demasiado. Hasta ese momento no había ninguna postura contundente que refleje que la Policía y Gobierno estaban preocupados y enfocados.
  • El intercambio de culpas y responsabilidades con la Fiscalía.
  • Troll centers que atacaban a María Belén Bernal y a su madre.
  • Fallas en las declaraciones de los voceros. Ninguno calmaba, solo indignaban.
  • Priorizar la institución ante la vida no aplica, si hay víctimas. No son héroes que debe callar su sacrificio en pos de la estabilidad.
  • La imagen de Carrillo en moto en la búsqueda de los restos.
  • La forma cómo se presentó el tema ante la ONU.
  • Si el país está desolado ver a tus autoridades en fotos sonriendo, en eventos, inauguraciones, entrevistas sonriendo no hace bien a nadie.
  • Reconocer que al cuarto día de desaparecida, Cáceres principal sospechoso está desaparecido.
  • Fotos de nuestras autoridades sonriendo en inauguraciones de obras, eventos y demás.
  • Vivimos un duelo y una vergüenza nacional todo comunica y si como país e instituciones estamos conmocionados se debe notar por respeto a su memoria y a la indignación.

El mensaje que no fue

A continuación una serie de tuits o mensajes que las autoridades dieron con la explicación del error de criterio y coherencia al comunicar:

1-. “El ministerio pide perdón y ofrece una disculpa pública porque este hecho es condenable. No son un tema específico de quien lleva uniforme sino presente en toda la sociedad”. Error.

Al decir ‘no es un tema específico’ se entiende que la culpa es de toda la sociedad, lo que en la mente del público significa: aquí la culpa es de ustedes porque no de la Policía.

Cuando quieres ofrecer disculpas sinceras no planteas excusas ni agregas comentarios exculpatorios: te pido disculpas, pero no acepto que soy responsable. Eso es lo que se entiende.

2.- “Un poco de esperanza en medio de este dolor. No es un acto cometido por la policía, este es un acto de un irracional”. Error.

No hay esperanza alguna en el asesinato de María Belén Bernal. Es un acto irracional el asesinato, pero el ocultamiento de información, la lentitud en los procedimientos, la falta de tino al proceder y declarar ante los ciudadanos de las autoridades, no son irracionales.

3.- “Aquí hay un mal miembro de la Policía Nacional y lo que debemos proteger es el prestigio institucional, los procedimientos institucionales que garanticen que haya sanción”, Diego Ordóñez, secretario nacional de Seguridad Pública y del Estado.

Fue la única y más desacertada declaración que potenció la idea de que importaba más la institución más allá de las responsabilidades y el valor de la vida.

4.- Otra vocería desafortunada del ministro Carrillo fue en el programa Vera a su manera: “Si evitaban el ingreso de la señora (#MaríaBelénBernal) tal vez no pasaba nada, porque la señora fue la que se trasladó allá.”

Sin palabras, lo que muchos entendieron fue: si no sales a la calle, no te roban. Si no usas minifalda, no te violan.

Las excusas nunca son buena idea y trasladar la responsabilidad a terceros tampoco. No aclares que oscureces.

5.- Pero los mensajes unilaterales y equivocados persistían:

“Este es un delito pasional, es un delito que no se planificó y debió dejar muchos indicios y esos indicios permiten hacer trazabilidad para encontrar culpables y a la persona”: ministro Carrillo.

Recordemos que la indignación pública no estaba por el hecho de que hubo un femicidio sino porque ocurrió en manos de un oficial, dentro de una academia de policía sin ningún auxilio por parte de quienes nos protegen.

6.- En Twitter fue peor. Su mensaje otra vez priorizando el nosotros al ustedes. “La Policía Nacional hizo su trabajo y encontró a María Belén. Lamento profundamente su muerte, un femicidio que no quedará en la impunidad. Encontraremos a Cáceres donde esté y lo entregaremos a la justicia. Pido perdón y ofrezco una disculpa a Elizabeth Otavalo y a su nieto”, escribió el ministro del Interior.

Pasaron once días e hicieron el trabajo por encontrar el cuerpo y no por evitar una muerte. Era claro que hacia allá iba ir la opinión pública.

El porqué decidió iniciar con esa frase, es un misterio. Pobre Community Manager. Este tuit -del trabajo bien hecho- del ministro Carrillo iba como cita a una publicación del presidente Lasso que anunciaba el hallazgo de los restos: Con profundo dolor e indignación lamento informar que María Belén fue encontrada. Su femicidio no quedará impune y todos los responsables serán sometidos a la ley. Mi solidaridad con su madre Elizabeth y su pequeño hijo”. Tuit acertado del primer mandatario, pero afectado por el mal tino de la cuenta del ministro que hacía de vocero.

El mensaje oficial del presidente quedó en un segundo plano con la inmediata y acertada respuesta de Elizabeth Otavalo, madre de María Belén, exigiendo justicia.

“Presidente, exijo justicia. Esto es un crimen que pasó en la escuela superior de la Policía Ecuador. Me arrebataron a mi hija, a manos de un servidor de la Policía prófugo. Ruego a las universidades apoyo en los exámenes médicos legales. Necesito saber la verdad”.

Mensaje claro que dejaba sentir la soledad ante el poder, la desconfianza ante el sistema y la necesidad de visibilizar su pedido de justicia.

Otra noticia trágica que marca la visibilidad del país

No solo Ecuador miraba absorto cómo después de once días no había una respuesta contundente. Desde CNN, Fernando del Rincón creó HT dedicado a analizar lo que nos pasaba a todos. #CONCLUMARIABELEN.

Germán Cáceres, el policía que fracasó en su coartada y se convirtió en el principal sospechoso del asesinato de María Belén Bernal

“Lasso pide ayuda para combatir el narco, pide ayuda para la violencia de la mujer. Si necesita tanta ayuda, entonces no hubiera aceptado ser presidente. Y Carrillo por respeto a la memoria de María Belén, renuncie”.

Mientras se unían a la discusión ecuatorianos y latinoamericanos, que sentían como propio este caso síntoma de la desorganización que existe en nuestros países.

La BBC, Euronews, CNN, RT, diario El País, DW, EFE, The Washington Post, reportan la noticia. Visto desde afuera los cabos sueltos, la incoherencia y lo incomprensible de la inacción para que no existan más detenidos, y la sensación de inseguridad en una academia policial como síntoma de la crisis de seguridad e institucional en un 2022 en que Ecuador es recordado por dos hechos graves: masacre en las cárceles y levantamiento indígena.

Las disculpas públicas, los discursos desde la empatía aunque -sea por estrategia de la gestión política de las autoridades- marcan la diferencia en una crisis.

Se trata de calmar y actuar sin excusas. Y, hoy los ciudadanos tenemos una gran responsabilidad, lograr que nuestras causas trasciendan lo digital y generen una actitud en online para que la lentitud de quienes tienen el poder no sea cómplice del abandono y la seguridad. Desde nuestros teclados presionamos para lo que podría ser callado en otras épocas sea visible ante el mundo entero. Los políticos también tienen responsabilidad. Actuar con tino y respeto no capitalizando la tragedia sino generando presión y acción. Mucho que aprender y mucho por hacer desde la trinchera digital de cada ecuatoriano que en este lamentable caso hemos visto cómo desnuda las fallas y presiona a quien tiene el poder para que mida sus palabras y enfoque sus acciones.

No podemos dejar de exigir respuestas, no debemos quedarnos callados. Honremos el último mensaje que ella nos dejó como señal de que todas sin importar profesión, clase social o tipo de relación, todas somos María Belén.