En este Gobierno o en los próximos habrá una inminente erupción de proporciones considerables del volcán Cotopaxi. Los especialistas y los estudios lo determinan así. Los registros históricos detallan que el 26 de junio de 1877 el volcán Cotopaxi tuvo una gran fase eruptiva que sorprendió a los científicos de la época debido al daño que ocasionó.

Los lahares provocados por el coloso llegaron hasta el océano Pacífico.Por este tipo de actividad, el Cotopaxi es el volcán que mayor riesgo le generaría al país si erupciona con fuerza y por eso también es uno de los que tiene una red de monitoreo más amplia.

Una erupción fuerte del volcán Cotopaxi provocaría lahares que llegarían hasta el océano Pacífico

Además, un sistema de alerta temprana. El periodo de recurrencia de una erupción de este volcán está entre los 80 y 150 años. La historia y la ciencia indican que si en el pasado hubo una erupción fuerte, en el futuro también la habrá.

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Sin embargo, actualmente hay equipos instalados en el Cotopaxi que permiten saber si su proceso eruptivo se está incrementando y esto permitiría una evacuación segura de las 770.000 personas que están en la zona de exposición, dice Rodrigo Rosero, subsecretario general de la Secretaría Nacional de Gestión de Riesgos.

El volcán está activo desde 2015. En cualquier momento, en cualquier administración le va a tocar enfrentar un proceso de erupción con mayor nivel de explosividad. Bajo ese criterio técnico cuando llegamos decidimos generar procesos para prepararse, aunque ahora nos ha tocado hacerlo con la presión de que el volcán está activo”, señala.

El funcionario agrega que es poco probable tener un escenario de una erupción violenta de un momento a otro. Actualmente hay 22 vigías que están alrededor del volcán que mantienen constante comunicación con el Instituto Geofísico y el ECU911.

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Mario Rocha es uno de los vigías del coloso. Afirma que constantemente envían reportes a las autoridades competentes para evaluar los escenarios. En estos días se reportó olor a azufre, pero que esto es un escenario normal en la actual fase en la que se encuentra el volcán.

Además, hay equipos instalados en el coloso que permiten supervisar la actividad y por ahora las señales indican que los niveles no llegan ni siquiera al escenario que se vivió en 2015, cuando fue moderado. Se tienen siete años de datos.

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Instituto Geofísico monitorea totalmente a seis volcanes que son los más activos de Ecuador

El escenario más probable es que nos mantengamos como estamos con emisiones de cenizas, gases. Un segundo escenario es que lleguemos a los niveles del 2015″, afirma Rosero.

Recalca que la ciudadanía debe entender que el sistema de sirenas instaladas en las poblaciones de riesgo no es que siempre se activarán y dirán a la población que tienen, por ejemplo, media hora para evacuar: “Vamos a llegar al escenario de decir mañana se suspenden las clases que quedan en la zona de incidencia. Cuando activemos las sirenas será cuando tengamos una alerta roja, pero habiendo pasado por naranja y amarillo. Pediremos evacuar en un escenario muy fuerte”.

Según el funcionario, también se tienen listos los centros que funcionarían de albergue tras una potencial erupción. Afirma que han contactado a más de cuatro mil personas que viven en zonas aledañas para comunicarles los peligros del volcán y que esta cifra irá subiendo. También realizarán simulacros de evacuación los próximos meses. (I)