‘Slackline’ entre las cúpulas de la Catedral de Ambato, iniciativa con la que se apunta a fomentar el deporte alternativo

Las personas que caminaban por las inmediaciones de la Catedral, en el centro de Ambato, se mostraron sorprendidas al ver que, entre un grupo de deportistas, hubo quienes a través de una cuerda cruzaban entre las cúpulas mayores del templo.

El escenario se evidenció el jueves de esta semana. Sebastián Jara, presidente del Comité de Andinismo y Escalada de Tungurahua (CAE-T), informó que consideraron una forma para llamar la atención de la ciudadanía, pero especialmente de los niños y jóvenes, para que vean deportes alternativos.

Contó que esta fue una segunda prueba de lo que van a realizar a mediados de noviembre en cuanto a deportes de aventura, entre ellos escalada, slack line, rapel y ejercicios de gimnasia en telas, así como demostraciones de rescate en alta montaña.

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Mencionó que este tiempo, en que se vive un sedentarismo de la juventud y la sociedad en general, se ha visto marcado por actos de violencia. Con estas presentaciones buscan demostrar que el deporte puede cambiar vidas, especialmente las de los chicos. Eso —dijo— es lo que se logra con los deportes de aventura, al aire libre, los que se practican en contacto con la naturaleza.

Jara añadió que la actividad que se cumplió el jueves se hizo con estándares de seguridad y profesionalismo. Sostuvo que hubo gente especializada y que la actividad contó con los permisos necesarios.

Explicó que en la actividad participó personal de los clubes que conforman el CAE-T, entre ellos Desnivel Climbing Club, Ivox, La Iguana, Montaña Tungurahua, Mujeres en la Cumbre, Wolves Mountain, Lobos de la Montaña y Aventura Baños.

Hicieron descenso de rapel con doble línea de seguridad desde la cúpula hasta la primera terraza, simulacro de rescate en la montaña, así como slack line.

Esta última se practica con una cinta de entre 10 y 25 centímetros que se templa de una zona a otra (en este caso, de las cúpulas de la Catedral), con el menor grado de inclinación que se pueda, con seguridad de arnés puesto a la cintura, con una línea de vida sujeta a un mosquetón para evitar la caída al vacío en caso de algún resbalón.

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Por su parte, el padre Mauro Cuevas, párroco de la Catedral, informó que el obispo de la Diócesis de Ambato, monseñor Giovanny Pazmiño, dijo que, al ver que contaban con todas las medidas de seguridad y permisos, consideró conveniente la realización de esta actividad.

Refirió que para aquello hubo la planificación técnica desde hace dos meses.

Señaló que es inusual observar este tipo de actividades en el medio, que incluso eso llamó la atención de mucha gente, y que sirvió para evidenciar que las cúpulas del templo no están en las mejores condiciones y que requieren mantenimiento. (I)