La vuelta a la presencialidad en la mayoría de las actividades de Quito generó un aumento en el tráfico vehicular. Los trancones y largas filas han generado la denuncia en redes sociales de conductores y pasajeros, con ello, la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMC) informó que analiza medidas para mejorar el flujo de los automotores.

El aforo del 100 % en instituciones educativas, desde el lunes 14 de marzo, significó un aumento de tráfico del 35 %, expresó Viviana Morocho, directora de Operaciones de la AMT.

Para Morocho, todavía no se ha visto gran presencia de transporte escolar, pero sí vehículos particulares. “Recordemos que la pandemia (de coronavirus) aún no ha terminado, los padres talvez preocupados de sus hijos les trasladan en transporte particular”, añadió.

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La funcionaria indicó que las autoridades municipales tienen en sus manos una serie de recomendaciones como el retorno de los contraflujos en puntos de alta concentración vehicular, mayor control en zonas de parqueo prohibido para liberar las vías, entre otros.

El sector de El Trébol, en el centro de la capital, y las salidas del sur de la ciudad (avenidas 5 de Junio, Mariscal Sucre y Maldonado) que tienen uno o dos carriles son los puntos de mayor conflicto, a juicio de Morocho. A estos se le suma el sector del coliseo Rumiñahui, que en la tarde reporta alta carga vehicular.

“El retorno ha sido bastante masivo, el clima (lluvias) tampoco ha ayudado en estos días por lo que hemos tenido congestión en diferentes sectores”, agregó la directora de Operaciones.

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Hasta entonces, señaló que reforzaron la presencia de agentes para facilitar la movilidad y se coordinó con el Departamento de Semaforización para intentar brindar mejor fluidez en las vías.

Los agentes de la AMT trabajan en tres turnos diferentes, para cada uno cuentan con un aproximado de 500 funcionarios que se dividen para las parroquias rurales y urbanas. (I)