El Municipio de Quito y el Consejo de la Judicatura (CJ) posesionaron a 21 jueces de paz, quienes se encargarán de garantizar el acceso rápido y efectivo a los servicios de justicia para los habitantes de zonas rurales y urbano-marginales de la capital, que registran altos índices de conflictividad social.
El evento se desarrolló la tarde del viernes 6 de mayo y contó con la participación del presidente de la Judicatura, Fausto Murillo, y Daniela Valarezo, secretaria de Seguridad y Gobernabilidad de Quito.
Los jueces de paz son personas que recibieron capacitación y que pertenecen a los sectores de Llano Chico, Amagasí del Inca, La Magdalena, San Juan y San José del Condado.
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Tienen la facultad de resolver conflictos con base en criterios de equidad, para lo cual se tomarán en cuenta aspectos culturales concretos que, sin ir en contra de la ley, no están explícitos en normas o documentos legales, explicó el Municipio.
Los jueces podrán intervenir en disputas relacionadas con obligaciones patrimoniales, arrendamientos, contratos, deudas, conflictos laborales, casos sobre compra y venta de bienes, problemas de convivencia comunitaria, problemas familiares, ambientales, ente otros temas.
El proyecto que llevan adelante el Consejo de la Judicatura y el Municipio apunta a erradicar barreras para acercar los servicios de justicia a las comunidades. (I)
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