Manta, MANABÍ

La pesca sigue siendo un soporte económico para la economía de Manta. Un importante porcentaje de las divisas se mueve en empresas de este sector, y eso se refleja en el peso que tienen entre las principales empresas asentadas en Manabí.

En el 2021, las 500 mayores empresas de Manabí, por mayor cantidad de activos, según la Superintendencia de Compañías, tuvieron ingresos por ventas por más de 1.975 millones de dólares.

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De ese grupo, 242 empresas de Manta tuvieron ventas por 803,9 millones de dólares, es decir, más del 40 % de todas las ventas realizadas en Manabí las efectuaron empresas del puerto manabita.

El sector que más se destaca en Manta sigue siendo el de la pesca, con 308,4 millones de dólares, cerca del 39 % de lo vendido el año pasado.

Con esta estadística, de las cifras que expone la Superintendencia de Compañías, se sostiene que cuatro de cada diez dólares que obtuvo Manabí el año pasado se deben a la industria de la pesca.

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Las cinco empresas pesqueras asentadas en Manta que tuvieron más ingresos por ventas en el 2021 fueron Iberopesca, con 68,2 millones de dólares; Conservas Isabel, con 59,2 millones de dólares; Inepaca, con 48,5 millones de dólares; Pesquería Ugavi, con 20,7 millones de dólares; y Seafman, con 18,3 millones de dólares.

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Pero no siempre la pesca fue el soporte económico de Manta, que este 4 de noviembre celebra su centenario de cantonización. En el siglo XIX, los mayores ingresos que tenía la que aquella época era parroquia del cantón Montecristi eran por la exportación del sombrero de paja toquilla.

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A fines del siglo XIX, según el historiador mantense Joselías Sánchez, la tagua irrumpió como el negocio que atrajo la llegada de extranjeros a Manta. Pero la tagua también tuvo se declive en plena Segunda Guerra Mundial, y ya el café ecuatoriano, durante 1945, comenzaba a ganar adeptos a nivel mundial.

El comercio y exportación desde Manta de la tagua se mantuvo hasta finales de los 70 del siglo pasado; de ahí, la pesca comenzó a tomar el timón de los negocios en esta urbe hasta la presente época. Mas aquello, indica Sánchez, ya comienza a ceder un poco, y ahora el turismo y el sector inmobiliario tienen potencial.

La actividad de la pesca da trabajo a más de 25.000 personas no solo de Manta, sino de cantones vecinos, como Montecristi, Jaramijó, Portoviejo, Santa Ana y Rocafuerte; e incluso ha generado mano calificada que es pretendida en el extranjero, declaró Lucía Fernández, expresidenta de la Asociación de Atuneros del Ecuador (Atunec).

“Esta provincia se da el lujo de exportar mano de obra calificada del sector pesquero. Se fueron a Perú a dar a conocer toda la trazabilidad para el tema del dorado; se van a El Salvador a dar a conocer todo el proceso en el atún. Entonces, en sí, Manabí tiene un sector muy bien identificado, que es el pesquero”, señaló Fernández.

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Ahora, según la dirigente pesquera, Manta se debe potencializar en una ciudad de servicios, pero para aquello debe afrontar y solucionar sus graves problemas de contaminación y así escalar en otros sectores, como el turismo.

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Para Pablo Pinargote, presidente de la Cámara de Comercio de Manta (CCM), las empresas asentadas en esta urbe se destacan por la decisión de sus directivos, ya que no existen esfuerzos estatales para apoyarlos, como incentivos para que crezcan. Las líneas de créditos son escasas y las tasas de interés muy altas.

“Creo que una de las formas que permitirían incrementar un porcentaje importante de este tipo de ventas es principalmente generando nuevas líneas de créditos preferenciales para las diferentes actividades que tiene nuestra provincia, y eso redundará en mayor generación de divisas, mayor empleo”, indicó el titular de la CCM.

Para Teddy Andrade, coordinador de Planificación del Municipio de Manta, esta ciudad tiene que ir a una diversificación de su economía, pues consideró que la actividad productiva que genera actualmente más divisas al cantón ya tiene un límite.

Por ello, estimó que hay que fortalecer otros servicios, como el turismo, y así enfrentar los próximos quince años, en los que se prevé la necesidad de crear unos 35.000 nuevos empleos que demandará no solo Manta, sino los cantones adyacentes.

“Y eso se lo hace a través de una zona especial de desarrollo económico, con otros proyectos que también están difundidos ahí; esos proyectos que tienen y demandan ya una alta tecnología e innovación, como es la ciudad alimentaria, un parque industrial, un parque comercial y logístico y un parque o una plataforma de tecnología e innovación, que estará vinculada a la universidad”, declaró Andrade.

De ahí que el funcionario considera que, con la implementación de estos proyectos, se generará una ciudad que permita convertirse en un polo de desarrollo nacional.

Y en medio de ese mar de oportunidades por los que apuesta Manta, esta urbe sigue generando producción y nuevos proyectos en beneficio de esta urbe centenaria, que acoge a más de 300.000 habitantes. (I)