Variedad de precios y preparaciones de la fanesca están disponibles en hoteles, mercados y restaurantes de Quito en esta Semana Santa

La Semana Santa se vive con devoción religiosa y con la degustación de los platos tradicionales como la fanesca, una sopa milenaria preparada en Ecuador. La combinación de las culturas indígena y española forman un sincretismo que ha deleitado paladares locales y extranjeros.

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En esta época la preparación del platillo difiere según la zona del país, sin embargo, Quito es reconocida por poseer una de las más deliciosas fanescas. Además, en varias casas se preparan acompañantes, como el molo de papa (puré), arroz con leche dulce, dulce de higos con queso y manzanas horneadas, entre otros.

Para los turistas nacionales y extranjeros existe una gran variedad de lugares en los que pueden degustar de la tradicional fanesca. El Municipio de Quito, a través de la empresa Quito Turismo, preparó una ruta de las fanescas, a través de un mapa interactivo en el que se pueden conocer los más de 100 lugares de alojamiento y alimentos y bebidas en donde se puede encontrar el menú de la época.

En el sector de La Mariscal, en el centro norte de la capital, también se realiza una ruta de las fanescas. La Administración Zonal de este sector destinó una página web con la ubicación de los restaurantes que ofrecen este platillo típico y más opciones a degustar.

Fanesca en los mercados

Los mercados de Quito son reconocidos por sus alimentos frescos, la amable atención de sus propietarios y el inconfundible ambiente acogedor de una feria tradicional. Los precios son cómodos y los lugares se mantienen con la limpieza necesaria para atender a los clientes.

Sarita Rivera atiende en el mercado de Santa Clara, ubicado en el centro norte de Quito, por el sector de la Universidad Central, desde hace 60 años aproximadamente. Desde hace una década incluyó en su menú la fanesca. “Lo especial de mi plato, primero, es que se hace con mucho cariño y amor. También tiene los doce granos, aunque nadie le pone garbanzo, yo sí, eso le da un saborcito especial”, relató mientras servía en su puesto esquinero de la sección de comidas.

Con amabilidad invitaba a los visitantes a deleitarse del platillo tradicional de Semana Santa. “Venga, mi señor, venga le atiendo, mi caserito; venga, sírvase la fanesquita, está muy sabrosa”, dijo a los comensales.

El bacalao se sirve por separado, pues no todos los clientes desean servirse con esta especie de pescado. El precio de este plato está en $ 5 el grande y en $ 3,50 el mediano. Los dos llevan los acompañantes característicos como huevo cocinado, masas de pan, maduros fritos, queso, cebolla y ají.

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La fanesca en hoteles

Los hoteles de cuatro y cinco estrellas de Quito también han incluido como opción en sus menús la tradicional fanesca, que se ha conjugado con los postres que se servían en las mesas hace cientos de años como muestra de la recuperación cultural. Caminar por el centro histórico e ingresar a uno de los hoteles coloniales es una de las actividades preferidas por los turistas.

Anaí Avilés, capitana de servicio del Hotel Casa Gangotena, ubicado en la plaza San Francisco, en pleno centro histórico de la capital, señaló que la fanesca servida en su restaurante lleva siete de los doce granos que forman parte de la tradición (haba, haba pallar, fréjol, alverja, chocho, choclo, achogcha). Todos los granos son pelados para que no resulte pesado al momento de la digestión.

Este platillo se junta al sabor del zambo, zapallo, pepa de zambo licuada, entre otros ingredientes. En pequeños platos se sirven los acompañantes: escabeche de bacalao, huevo duro, empanadas pequeñas, trenzas de masa de pan, maduros fritos y ají.

Para degustar de este plato puede hacerlo en dos diferentes precios: la fanesca sola tiene un costo de $ 19,00. El plato tradicional acompañado con agua de frescos, preparada con nueve tipos de hierbas y el postre que se puede elegir entre tomate de árbol en almíbar o el “jucho”, que son tres frutas en almíbar: pera, durazno y claudia, tendrá un costo de $ 27,00.

“Tienen que probar nuestra fanesca porque es muy especial, lo delicioso de este plato se combina con el lugar tradicional que le transporta al pasado, es toda una experiencia”, añadió Avilés. (I)