Designan nuevos obispos en provincias del norte de Ecuador

La Conferencia Episcopal Ecuatoriana (CEE) anunció la designación de monseñor Antonio Crameri como nuevo obispo de Esmeraldas.

Crameri reemplaza en este cargo a Eugenio Arellano Fernández, quien durante 26 años ha sido representante de la Iglesia católica local y hace poco presidente de la Conferencia Episcopal Ecuatoriana.

Este lunes 5, Arellano oficializó la designación de Crameri en una reunión con sacerdotes y representantes de la educación fiscomisional de la provincia verde. Allí se conformó el comité para los actos de posesión del nuevo prelado, previsto para septiembre de este año.

El obispo saliente, Arellano Fernández, continuará como administrador del Vicariato Apostólico de Esmeraldas, aunque su deseo es culminar su carrera sacerdotal en San Andrés de Tumaco (Colombia).

Antonio Crameri ha sido párroco de la iglesia Santa Marianita; coordinador de catequesis del Vicariato Apostólico; miembro del consejo presbiteral y responsable de la formación permanente de los diáconos de Esmeraldas, entre 2002 y 2016. Además ocupó cargos como párroco de San Agustín en Flavio Alfaro y Novillo, y de la Arquidiócesis de Portoviejo, Manabí, entre 2016 y 2019.

En diciembre del 2019, Crameri fue nombrado por el papa Francisco obispo titular de Apollonia y auxiliar de la Arquidiócesis de Guayaquil. En febrero del 2020 recibió la ordenación episcopal en la Catedral de Guayaquil.

Crameri es el cuarto obispo que designa el Vaticano para la provincia de Esmeraldas desde 1955. El primero fue Ángel Barbizotti (+), quien permaneció en el cargo durante 18 años; por igual periodo estuvo Enrique Bartolucci (+); y luego Eugenio Arellano, con 75 años de edad y 26 años al frente del Vicariato Apostólico.

Tulcán

La CEE también informó sobre el nombramiento del padre Luis Bernardino Núñez Villacís como nuevo obispo de la diócesis de Tulcán.

Hasta ahora, el padre Luis Núñez se desempeñaba como sacerdote de la diócesis de Ambato y vicario general de esa jurisdicción. Colaboró en la parroquia San Antonio de Padua de la capital tungurahuense desde el 2015. (I)