El riesgo país que superó los 1.000 puntos con el paro que vivió Ecuador en junio pasado sigue subiendo en medio de altas y bajas y esta semana sobrepasó los 1.500 puntos después de casi dos meses de terminadas las protestas, pero es que ahora son el precio del petróleo y factores políticos los que le pasan factura a este indicador que mide las probabilidades de pago de un país y del que depende el costo de financiarse.

Los menos de 800 puntos que se tuvieron antes del paro nacional convocado por la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie) no se recuperaron, a pesar de que se firmó un acuerdo de paz, que están en marcha diálogos para concretar soluciones para los precios de los combustibles, por ejemplo, y que el ministro de Economía, Pablo Arosemena, viajó a reunirse con los organismos multilaterales. El lunes 22 de agosto se ubicó en 1.555 puntos y el martes 23 en 1.543 puntos, reporta el Banco Central del Ecuador.

Riesgo país llega a 1.600 puntos en Ecuador en medio de los diálogos del Gobierno y los indígenas

El editor de Análisis Semanal, Alberto Acosta Burneo, indica que el riesgo país en Ecuador tiene dos fuentes que impulsan su valor elevado. Por un lado la preocupación por la sostenibilidad de mediano plazo en las cuentas fiscales. “Este año con el financiamiento del Fondo Monetario Internacional y los mejores precios del petróleo y la reforma tributaria las cuentas fiscales tuvieron un respiro. Pero existe preocupación de quién nos dará financiamiento a partir del próximo año cuando termina el acuerdo con el Fondo y de qué política económica aplicará el siguiente presidente. La pregunta es si se abandonará la responsabilidad fiscal especialmente cuando en 2026 el país debe empezar a revisar amortizaciones de deudas importantes. Detrás de este miedo está la triste historia del país como mal pagador de sus deudas. Un país que tiene récord a nivel internacional del número de veces que ha declarado default en sus deudas”.

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También hay un factor coyuntural que mueve el riesgo país de manera permanente y es el precio del petróleo. Un precio del petróleo descendente causa preocupación en los inversionistas. “La visión de mediano plazo según el mercado de futuros es que el precio del petróleo seguirá descendiendo. Esto implica nuevos desafíos para las finanzas públicas ecuatorianas”, comenta.

Para el exvicepresidente Alberto Dahik, el riesgo país no bajará si no hay un cambio radical en el Ecuador, y con ese riesgo país alto no podemos financiarnos.

En su artículo Riesgo país otra vez menciona por qué sube tanto: Quienes analizan al Ecuador miran las cifras económicas, pero también el entorno político y no es muy bueno. “La Conaie por segunda vez paralizó al país, y ahora amenaza nuevamente con hacerlo si no se cumplen sus demandas. Y esas demandas significan más déficit, y ello es menor capacidad de pago de la deuda. Proponen controles de precios, proponen que no se vendan activos del Estado, proponen todo aquello que hace que un país deteriore su economía y no pueda pagar sus deudas. Los analistas ven que las mesas de diálogo tratan de frenar la inversión en minería, la única que puede sustituir en el mediano plazo al petróleo como fuente de divisas”.

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Pero indica que también ven un alto nivel de conflictividad. “Jueces que dicen que un funcionario no se puede posesionar, otros que sí se debe posesionar. Asamblea en pugna con el Ejecutivo y con el Consejo de Participación Ciudadana y Control Social y Ejecutivo en pugna con otras funciones. Esto es falta de gobernabilidad”.

Riesgo país baja 334 puntos en diez días tras viaje del ministro de Economía a Washington y por avance de mesas de diálogo

Tras su visita a organismos multilaterales, en julio pasado, y cuando el riesgo país estaba sobre los 1.300 puntos, el ministro Pablo Arosemena indicó que esa última subida ya no tendría que ver con Ecuador, sino con el contexto internacional. “La subida de las tasas de interés (por ejemplo), eso es por contexto global porque afecta a toda Latinoamérica”. Él esperaba que vuelva a bajar este indicador en la medida que vayan llegando a acuerdos en las mesas de diálogo. Al momento solo la mesa de banca ha firmado un acuerdo. (I)