En poco tiempo industria del cannabis medicinal ya busca mercados internacionales

En poco más de un año, desde enero de 2021 en que el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) empezó a expedir licencias, la industria del cannabis no psicoactivo o cáñamo ha avanzado en los procesos de permisos y producción de derivados e incluso con una nueva planta y planes para exportar estos productos.

El uso del cannabis medicinal se incluyó en la Ley Orgánica Reformatoria al Código Orgánico Integral Penal de 2019, y en el 2020 con el Acuerdo Ministerial 109 para regular la actividad.

Desde el año pasado, el MAG ha otorgado un total de 84 licencias, de las cuales 52 pertenecen a la licencia tipo 3 para cultivo de cannabis no psicoactivo o cáñamo, 7 a la licencia tipo 4 para cultivo de cáñamo industrial y 17 para la licencia tipo 5 de procesamiento y producción de derivados.

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Con este último tipo de licencia es con la que funciona la Asociación Ecuatoriana AYA Natural Products (AsoAya), que a finales de febrero pasado inauguró una planta donde desarrollan productos terapéuticos, suplementos alimenticios y cosméticos naturales, basados en la combinación del cannabis con el sacha inchi, también conocida como el “maní de los incas”, una planta con alto contenido de aceites con omega 3, 6 y 9 de gran importancia para la nutrición y la prevención de enfermedades crónicas.

La fábrica, ubicada en el sector de Tumbaco (cerca de Quito), tiene una capacidad inicial para más de 10.000 productos mensuales. Actualmente la producción es de al menos un 40 %, debido a que ya están entrando a tiendas a nivel nacional.

Andrés Cisneros, gerente general de AsoAya, reveló que se han invertido más de $ 350.000 en infraestructura, investigación y desarrollo de productos, así como en planes de marketing y publicidad, entre otros.

“Las inversiones se han ido realizando desde hace cinco años, se empezó con cosas básicas y un pequeño laboratorio, todo inversión de los socios; luego ganamos el fondo Emprende y hoy por hoy contamos con maquinaria más especializada, junto con un lugar mucho más grande y diseñado desde cero para la producción exclusiva de derivados del cannabis”, explicó Cisneros, quien recordó que la empresa obtuvo su personería jurídica en el 2019 en la Superintendencia de Economía Popular y Solidaria (SEPS).

AsoAya cuenta con tres líneas de productos: la línea dermatológica Samay para el cuidado de la piel con cremas sólidas antiarrugas, antiestrías, anticelulitis y agua micelar completamente natural; la línea veterinaria Kamana con shampoo sólido para mascotas y la línea cosmética Samy, que son barras de shampoo y acondicionador sólido.

Cisneros señaló que la licencia tipo 5 les permite únicamente la fabricación de derivados de cannabis, por lo cual la flor y biomasa de cannabis se adquiere a productores locales.

“En el Ecuador apenas se está comenzando con el cultivo de cannabis, por lo cual la oferta de proveedores aún es escasa, se está pagando alrededor de $ 1 por gramo de flor seca de alta calidad y orgánica. Cada vez hay más licenciatarios, por lo cual esperamos que el costo de la materia prima baje sustancialmente”, dijo el empresario.

Al respecto, la Subsecretaría de Producción Agrícola del MAG indicó que en la actualidad hay 575.09 hectáreas (ha) aprobadas con licencia 3 para cultivo de cannabis no psicoactivo o cáñamo, y es la empresa Producampo la que tiene mayor porcentaje de siembra aprobada con 249,95 ha.

Sin embargo, para la siembra de cannabis para uso medicinal las licenciatarias se encuentran en procesos de trámites de importación de semillas y son pocas empresas las que han iniciado con la siembra, por lo que hasta el momento hay una hectárea de cultivo de cannabis sembrado, ya que las primeras siembras de las licenciatarias son para realizar ensayos agronómicos a poca escala, explicó la Subsecretaría.

Las provincias donde están aprobados los cultivos son Pichincha, Guayas, Imbabura, Cotopaxi, Tungurahua, Azuay, Bolívar, Chimborazo, Los Ríos, Carchi, Esmeraldas, Manabí, Santa Elena y Santo Domingo de los Tsáchilas.

María Fernanda León, directora ejecutiva de Procosméticos Ecuador, expuso que esta industria tiene un gran potencial, pues resaltó que AYA no es la primera planta productora de cosméticos con cannabis.

En el 2019, Laboratorios Beautik lanzó al mercado productos capilares con ingredientes del cannabis y luego de esta se han venido produciendo otras, aseguró León, quien en cuanto a las pymes sostuvo que AYA es un gran referente de cómo una microempresa puede trascender, incluso con visión internacional para la producción de este tipo de productos y lo está haciendo con mucho éxito y expectativa.

La directiva recordó que Colombia fue uno de los primeros países en producir cosméticos con cannabis, esto gracias a que los países de la Comunidad Andina de Naciones (CAN) cuentan con regulación internacional que norma el uso de ingredientes para los cosméticos.

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Explicó que dentro de la Decisión 833 de la CAN se establecen los listados de ingredientes permitidos para la producción de cosméticos, y dentro de estos listados ya constan los ingredientes del cannabis, con sus respectivas restricciones, para ser usados en la formulación.

“Ecuador ya comenzó a producir, gracias a la normativa andina, desde el 2019 y nos estamos posicionando como un país que puede ofrecer estos productos al mundo”, destacó la directora de Procosméticos, quien reveló que el sector trabaja para hacer que se respete la supranacionalidad de las normas y acuerdos internacionales, y así seguir potencializando a los cosméticos con cannabis, que según ella ya deben responder a varios compromisos de exportación con compradores del exterior.

Y es que las expectativas de la industria son altas.

Cisneros reveló que empezaron el proceso de calificación y certificación para mercados internacionales. Indicó que el objetivo a corto plazo es la exportación.

“La calidad e innovación de los productos que hemos desarrollado están para mercados internacionales, es por esto que fuimos seleccionados para participar de la feria cosmética más grande del mundo, Cosmoprof 2022 en Bolonia, Italia, donde vamos a exponer nuestro trabajo y abrir mercados internacionales para el país”, aseguró el empresario. (I)