Hermógenes, Jairziño y Winter Calderón Macías están alegres. Pese a ser invidentes y no poder ver el sistema de extracción de agua desde un pozo, pudieron sentir como un chorro les caía de una manguera. Quedó para el olvido el salir en busca del líquido para uso familiar, a tientas, lejos de su casa en la comuna El Aguacate del cantón Bolívar en Manabí.

Gracias al aporte de varias personas se pudo construir un pozo cerca de su casa, algo que para los hermanos invidentes y su familia era una misión imposible en los últimos días.

Carlos Bravo, gerente de radio Politécnica de Calceta (cabecera cantonal de Bolívar), señaló que al conocer la historia de los cuatro hermanos invidentes (Freire José es el cuarto hermano, pero no puede movilizarse), que hace más de una semana publicó EL UNIVERSO, varas personas se comunicaron con él para adecuar el pozo.

Publicidad

Señaló que incluso de Quevedo llegó un aporte y se hicieron anillos de cemento y se cavó el hoyo para sacar el agua con una bomba sumergible.

“La historia hay que contarla como es, no estamos empeñados en desprestigiar a nadie, ni desacomodar a nadie… Lo importante es que los hermanos Calderón ya cuentan con este anhelo de años, el que incluso nosotros no sabíamos que pasaban este sufrimiento”, relató Bravo. Esto porque llegaron personas a ofrecer ayuda pero solo fueron ofertas.

Los hermanos viven a 55 km de Calceta, en una casa de caña y ellos, pese a su ceguera, desgranan maíz, acarrean agua y hacen otras tareas para ayudar a sus padres de la tercera edad. Este lunes 5 debía llega a ese sector manabita la misión Las Manuelas del Gobierno con atención y ayudas técnicas. (I)