Abogado de uno de los extranjeros detenidos en Santa Elena denuncia que habrían pruebas que no han sido periciadas en uno de los casos en que se cita a Jacobo Bucaram

La instrucción fiscal contra los extranjeros Shy Dahan y Oren Sheinman, detenidos en Santa Elena el 1 de junio con más de 100 000 dólares y credenciales falsas, ya concluyó hace un par de semanas y, según el abogado Héctor Gabriel Vanegas, quien defiende a Sheinman, nunca se explotó el celular de su cliente, pese a que en su versión habría mencionado que tenía videos, chats y fotos de las personas que le entregaron el dinero y los cuestionados documentos.

Lo que detalla el abogado es que los extranjeros fueron intermediarios en la venta de insumos médicos durante la pandemia y en su versión, que ya es pública, ellos señalan a Jacobo Bucaram Pulley como el cliente, quien habría adquirido 21 400 cajas por $321 600, dinero entregado en efectivo.

La transacción, según los detenidos, se habría realizado en una casa situada en Kennedy Norte, donde esperaba Bucaram junto con otras 15 personas.

El abogado sostiene que nunca se llamó a declarar ni a Bucaram ni a nadie más, pese a las versiones. Además detalla que los insumos fueron enviados desde Quito, por un supuesto empresario, identificado como Bryan P. V., quien días antes de la captura puso una denuncia contra los extranjeros por estafa, pues nunca le llegó el pago.

Luego el afectado los reconoció en los noticiarios cuando fueron detenidos y acudió a la Fiscalía para reclamar el dinero incautado, pues asegura que es producto de la venta.

El 3 de junio Abdalá Bucaram fue detenido y en su casa hallaron insumos médicos.

Según Oren, los documentos falsos que portaban fueron entregados a ellos en un edificio de la capital, por hombres que se identificaron como la guardia personal de un alto funcionario del Gobierno.

Galo Pérez, comandante de la Policía de Santa Elena, detalló tras la captura que se trata de credenciales falsas del Ministerio de Relaciones Exteriores, con los cargos de agregado civil e investigadores criminales de la agencia antidrogas de la Embajada de Estados Unidos en Ecuador.

El abogado Vanegas aseguró que en los celulares que están bajo custodia de las autoridades está también una foto de ellos en el momento de la entrega de las credenciales. Además contó que los extranjeros reenviaron esas pruebas a sus familiares en el exterior antes de ser capturados cuando iban a Salinas.

Para periciar los teléfonos y llamar a declarar a Bucaram debería anularse el proceso penal y empezar uno nuevo.

Dos días después de la captura de los dos extranjeros, la Fiscalía decomisó decenas de cajas con insumos en el domicilio de la familia Bucaram, pero ninguno había sido vinculado a alguna investigación hasta la tarde de este miércoles 22.

Jacobo Bucaram aún no tiene un abogado, sin embargo, en Twitter mencionó que no ha salido del país, que es víctima de linchamiento mediático de algunos medios de comunicación y que “el que nada debe, nada teme”.

Detalle

Anoche, la Fiscalía solicitó formulación de cargos contra Jacobo y sus hermanos Abdalá y Michelle por el presunto delito de asociación ilícita en la venta de medicinas. Esta medida también se dispuso para otras once investigados, entre esos Luis Jairala Zunino, exgerente del hospital Teodoro Maldonado Carbo. (I)