El sector pesquero, industrial, constructor, automotor y hotelero aún no deciden qué opciones laborales de la nueva Ley de Apoyo Humanitario aplicarían con sus trabajadores; unas esperarán el pronunciamiento del presidente Lenín Moreno respecto a un veto y otras piensan en estrategias para generar fuentes de empleo.

Caterina Acosta, presidenta de la Cámara de Industrias, señala que el sector va a esperar el documento definitivo de las formas de trabajo y así conocer la reacción de las empresas para tomar una decisión.

“El sector industrial está haciendo todo lo posible por mantener el empleo en esta crisis”, dice Acosta.

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Holbach Muñetón, presidente de la Federación de Cámaras de Turismo del Ecuador, asegura que es muy pronto saber si aplicarán reducción de la jornada hasta por cuatro años o un contrato emergente por las pérdidas que acumulan desde que se inició la emergencia.

“En este momento no hay actividad, nosotros nos reactivamos cuando todos se hayan reactivado”, indica.

Los acuerdos entre el empleador y trabajador que también se indica en la normativa son para Genaro Baldeón, presidente ejecutivo de la Asociación de las Empresas Automotrices del Ecuador (Aeade), una opción de preservar las fuentes de empleo.

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La Ley de Apoyo Humanitario establece acuerdos de preservación de fuentes de empleo entre trabajadores y empleadores, un contrato especial emergente por dos años, que podrá ser renovado por una sola vez por el mismo plazo. Aquí la jornada podrá ser parcial o completa con un mínimo de 20 horas y un máximo de 40 horas semanales. Así también, la reducción de la jornada hasta un máximo del 50% por dos años y renovables por el mismo periodo, por una sola vez.

Para Henry Yandún, vocero de Constructores Positivos, y Bruno Leone, presidente de la Cámara de Pesquería, están descartadas las opciones laborales. Dicen que hace falta más reactivación.

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“No creo (que se acojan) porque el Ecuador necesita producir más. No pensamos en reducir gente (...) El sector está necesitando contratar”, dice Leone.

Yandún indica que en la construcción es variable porque el trabajo es según las obras y al momento hay el 5 % de colaboradores activados.

El sector automotriz en abril de 2019 comercializó 10 000 vehículos, en abril de este año fueron 700. Foto: Cortesía Aeade.

La constructura Ambiensa, que tiene varios planes habitacionales en Chongón, aplica con sus colaboradores el teletrabajo, trabajo presencial y reducción de la jornada.

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Rhonda Cevallos, vicepresidenta de Planificación y Desarrollo de la constructora, dice que la recuperación del sector se hará con trabajo.

Personal en distintos sectores productivos

  • El sector pesquero tiene activados a 108 mil personas, menos del 1 % teletrabaja en área administrativa.
  • En el automotriz, de las 200 empresas dentro de Aeade, hay 1200 colaboradores activos a nivel nacional, algunos desde casa.
  • En el de la construcción, el 5 % labora en obras
  • En el industrial es el 25 % del personal, esto es, más de 20 260 colaboradores.
  • Y en el sector comercial, la mayoría se mantiene en teletrabajo.
  • En el sector exportador la modalidad es mixta: teletrabajo y presencial, según Senae. Están divididos: personal de grupo vulnerable: 100% en teletrabajo; personal civil: 12% presencial y 88% teletrabajo; personal uniformado Cuerpo de Vigilancia Aduanera: 95% presencial y 5% modalidad. (I)