Wilma Andrade (ID), parte de la Bancada de Integración Nacional (con 12 asambleístas) que aglutina a ID, Pachakuitk, Sociedad Patriótica, y varios movimientos locales, consideraba, ayer, que la votación para la Ley de Ordenamiento de las Finanzas Públicas, estaba en la cuerda floja. Hasta la tarde, antes de que se reinstalara la sesión definitiva, se contaban con 70 votos justos y no existían votos para el archivo. Por eso había el peligro de que la ley quedara en un limbo, y que esta se aprobara por el Ministerio de la Ley. El tema de la autonomía de la Seguridad Social, si bien se blindó en varios puntos de la norma todavía dejaba unas dudas a algunos asambleístas.

¿Qué es lo que aún le preocupa a la bancada del BIN sobre la ley de Finanzas?

Al inicio, como mandó el Ejecutivo, era una ley absolutamente perversa, con normas que indicaban por ejemplo que en caso de crisis fiscal la Seguridad Social cooperará para enfrentarlas. Esto era menoscabar no solo autonomía sino las finanzas de la Seguridad Social, que tiene dineros distintos a los del fisco.

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¿Qué ha pasado con esas disposiciones ahora tras los debates?

Cuando analizamos había 29 disposiciones sobre la Seguridad Social en el texto, y todo se decía que se normaría vía reglamento. Nosotros pusimos los puntos claros y esos temas, de alguna manera se corrigieron. Se dejó claro que es autónoma igual que los GAD. Fue muy importante la presencia del ministro de Defensa en la Comisión y su pedido de respeto a la autonomía. En ella nos anclamos para hacer los cambios. Pese a ello aún hay seis disposiciones que involucran al IESS, pero que de todas maneras serán más fáciles controlar.

Aunque no están todos los cambios, ¿están dispuestos a votar a favor de la ley?

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Tenemos que hacer un análisis político a lo interno. Pachakutik tiene disposiciones de la Conaie de no votar por la ley y tampoco hay votos para el archivo, y tendríamos los votos justos para aprobar, pero corremos el riesgo que entre por el Ministerio de la Ley, y ese sí es un escenario más grave, porque quedaría la Seguridad Social desamparada. Yo prefiero votar por la ley con los blindajes que hemos hecho. El otro escenario es peor.

¿Qué se logró blindar?

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Hemos introducido disposiciones sobre la autonomía y se indica que los recursos no son del fisco. Además como todo se quería hacer a través de reglamentos del Ministerio de Finanzas, ahora se ha previsto que los reglamentos lo hagan las máximas autoridades de los propios entes de Seguridad Social. El resto, que haya organización en la finanzas, eso está bien.

El IESS y la Seguridad Social ya eran parte del sector público no financiero según el reglamento del Coplafip, ¿porqué ahora muestran la preocupación, si ya funcionaba así? ¿Qué cambió?

Antes tenían una Asamblea con 100 correístas que aprobaban lo que les ponga el ejecutivo y así lo aprobaron. El tema quizás ahora es que hay una nueva configuración de fuerzas en los cuales precisamente, podemos alertar y condicionar por la necesidad de votos. Ahora no estamos solo fortaleciendo la autonomía sino recuperándola. (I)