En este año se registraron las primeras eclosiones de tortugas marinas en la playa de Las Tunas, provincia de Manabí, y sus alrededores gracias al apoyo de la Embajada Británica en Ecuador, Fundación Jocotoco y la comunidad.

Integrantes de Jocotoco, varios estudiantes de la Universidad de Guayaquil y comuneros empezaron un monitoreo de anidación de las tortugas marinas desde octubre 2019 e identificaron tres playas claves para la anidación: Las Tunas, Puerto Rico y Ayampe.

Además, se han dictado talleres sobre la importancia de conservar de esta especie y para proteger sus nidos en las playas comunales de la zona.

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Las tortugas marinas enfrentan varias amenazas como la destrucción de nidos, la contaminación de plástico, la pesca artesanal e industrial, y el tráfico de especies.

Durante los monitoreos realizados se registraron las especies tortuga verde (Chelonia mydas), en peligro de extinción, y la tortuga golfina (Lepidochelys olivacea), catalogada como vulnerable. También existen registros antiguos de tortuga carey (Eretmochelys imbricata), especie en peligro crítico de extinción.

En la playa de Las Tunas se protegen un total de 10 nidos. El 8 de febrero pasado se realizó una socialización para que la comunidad conozca las acciones que perjudican la supervivencia de las tortugas marinas y cómo pueden ayudar a conservar los nidos.

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Por ejemplo, evitar pisar los nidos porque la arena se compacta e interrumpe la eclosión, cuidar a las mascotas para que no destruyan los huevos.

También se destacó la importancia de no botar basura en la playa porque las tortugas pueden ser lastimadas o ingerir residuos plásticos. "Gracias al apoyo de la Embajada Británica podemos iniciar este importante proyecto para proteger a las tortugas marinas en nuestra comunidad. Queremos que la población haga más conciencia de lo que significa proteger a las tortugas marinas" menciona Byron Delgado, administrador de la Reserva Ayampe de la Fundación de Conservación Jocotoco.

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Las zonas donde están los nidos son turísticos, por eso se destaca la importancia de respetar las épocas de anidación (octubre a marzo) reduciendo el ruido y disminuyendo la iluminación en las noches. Estos factores pueden causar que las tortugas se desorienten y no logren llegar a su destino.

La población de tortugas marinas está disminuyendo, y la manera más eficiente de protegerlas es que las comunidades que viven en las playas conozcan la importancia que estos animales tienen en la biodiversidad y actúen a favor de su protección. Los talleres realizados con la comunidad van acompañados con la marcación de zonas de anidación y socialización puerta a puerta.

En estos meses están naciendo más tortugas marinas en las playas de la comunidad, lo cual es un éxito para el incremento de las poblaciones de estas especies tan emblemáticas, afirma Jocotoco. (I)