Un reo del Centro de Retención Provisional de la cárcel Regional fue apuñalado en su celda y murió en la prisión la noche del jueves. El fallecido fue identificado como Mario N., quien tenía siete detenciones por tenencia de armas y robo.

Este crimen elevó a 213 la cifra de muertes violentas en la Zona 8 (Guayaquil, Durán y Samborondón). La tasa de estos crímenes se incrementó considerablemente este año, pues en 2018, a la fecha, se registraban unos 160 casos.

La última semana, la violencia ha recrudecido y hombres han sido acribillados prácticamente a diario.

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Por eso se busca capacitar al personal en la Unidad que investiga las Muertes Violentas que pertenece a la Dinased.

Los directivos policiales clausuraron el segundo curso de  Homicidios para al menos una veintena de agentes que realizan las investigación de estos casos, pues casi un tercio de los crímenes que se cometen a nivel nacional se producirían en la Zona 8, especialmente en Guayaquil. Esto si consideramos los datos que el Ministerio de Gobierno manejaba sobre los primeros seis meses del 2019.

Solo hasta el 10 de julio de este año, la cartera de Estado tenía registradas 335 muertes a nivel nacional por violencia criminal. En Guayaquil se habían producido 104 de estas.

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Los policías regularmente los catalogan como ajustes de cuentas por territorio y suelen ser hombres en moto quienes ejecutan los asesinatos a bala.

Últimamente, en las escenas también reportan el uso de automóviles de un modelo muy popular y que es también el más robado, según registros de la Policía Judicial.

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Otro medio de transporte que ha empezado a usarse en los crímenes son las camionetas. El fin de semana pasado un taxista informal recibió 16 disparos cuando estacionaba el auto afuera de su casa en la cooperativa Juan Montalvo.

Varios testigos reportaron que los asesinos iban en una camioneta negra con rayas blancas y que dos hombres lo esperaban afuera de su casa.

El día anterior otro taxista informal fue apuñalado y murió en su carro en la vía a Salitre.

Varios hombres que supuestamente huían en una camioneta fueron detenidos. La Policía reportó que tenía manchas de sangre en su ropa.

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Tres días después el jefe de seguridad del Puerto Marítimo fue acribillado en el Guasmo a pocos metros de su lugar de trabajo. Tras ese crimen se conoció que otros dos guardias de la terminal portuaria habían sido atacados y que existiría otro fallecido.

Pero la jornada del jueves 24 de octubre superó las cifras. Cuatro hombres murieron por disparos en Guayaquil, dos fueron baleados en Bastión Popular, uno recibió 16 tiros mientras estaba sentado en el portal de un vecino y los tiros traspasaron las cañas de la casa. Los otros dos sujetos fueron acribillados en el Guasmo.(I)

 

213 muertes violentas se han registrado en la Zona 8 hasta la fecha. El año 2018 se cerró con 198 casos.