En Ecuador no se conoce el paradero el exlegislador Virgilio Hernández, cuyo domicilio fue allanado la mañana del lunes, el mismo día que se detuvo a la prefecta de Pichincha Paola Pabón, pero este miércoles, el sitio web ElEstado.net publicó un testimonio entregado por él mismo, de acuerdo a la publicación.

Hernández, quien es el secretario ejecutivo del movimiento político de Revolución Ciudadana, llamado Fuerza Compromiso Social, fue uno de los nombres cercanos al correísmo a los que el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, mencionó durante la crisis política por las protestas indígenas esta última semana.

En una cadena nacional Moreno denunció la injerencia del correísmo en las violentas manifestaciones y acusó a Rafael Correa, Ricardo Patiño, Paola Pabón y Virgilio Hernández, de buscar un ‘golpe de estado’ en el país. 

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En esa carta Hernández habla de los días de protestas y se refiere a la situación legal de Pabón y la suya propia.

El exlegislador que se mantiene en la clandestinidad dice que en su caso se lo acusa de 'golpista' por haber dicho al siguiente día de la adopción de las medidas económicas, que el Gobierno tenía una disyuntiva: "Se cae el paquetazo o se cae el gobierno" y luego porque propuso la aplicación de la figura constitucional de la "Muerte Cruzada".

Hernández en su carta critica las evidencias existentes en su contra, pues cree que solo son publicaciones de Twitter y orientaciones a la militancia para que acompañe a la movilización indígena. Sobre este último punto, dice, todas las orientaciones estaban en el marco de la ley e incluso circulaban públicamente en redes sociales.

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"Ratifico mi voluntad de concurrir al proceso, simplemente quiero que se me brinde las garantías de la Constitución y convenciones internacionales de derechos humanos, como la de ser considerado inocente y tratado como tal y que se apliquen normas del debido proceso. Concurrir al proceso también permitirá que Presidente de la República y altos funcionarios demuestren las graves acusaciones o queden en evidencia frente al país. no espero disculpas ni indemnizaciones, simplemente la verdad", concluyó.

Mientras se desconoce el paradero de Virgilio Hernández, sus coidearios Gabriela Rivadeneira, Soledad Buendía, Carlos Viteri Gualinga, todos asambleístas; así como Luis Fernando Molina, asambleísta alterno nacional; Edwin Jarrín, cónyuge de Soledad Buendía; Tania Pauker, cónyuge de Carlos Viteri y Leónidas Aníbal Moreno Ordóñez, procurador síndico de la Prefectura de Pichincha, están refugiados en la embajada de México en Quito.

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Otras dos simpatizantes del correísmo cumplen prisión preventiva: la prefecta de Pichincha, Paola Pabón, por supuesto delito de rebelión; y la exalcaldesa de Durán, Alexandra Arce, por presunto delito de asociación ilícita. (I)