Laura Alcívar salía desde el hospital Oswaldo Jervis, en el cantón Salitre, provincia del Guayas, cerca de las 18:00 de este miércoles.

Su hija, de 9 años, fue una de las 35 personas (32 menores de edad y 3 adultos) que resultaron afectadas tras inhalar involuntariamente malatión, químico usado como insecticida, y que se derramó cerca de las 13:30 de ayer en un tramo de 100 metros de la vía a Vernaza, en el cantón antes citado.

"Mi hija empezó a vomitar y se desmayó cuando la fui a recoger", exclamó Alcívar, un poco más aliviada luego de horas de tensión.

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La sustancia química, un líquido de color blanco, cayó desde una camioneta que transitaba por ese sector. El fuerte olor que emanaba la sustancia, causó que estudiantes del colegio Francisco Íñiguez, cercano a la zona, comiencen a presentar síntomas como ahogamiento, dolor de cabeza, mareos, picazón en el cuerpo, vómito.

En tricimotos y cargados en brazos, los menores comenzaron a acudir hasta el hospital para ser atendidos, según Julio Castro, testigo de la llegada de los afectados.

"Los padres estaban desesperados, habían niños con tanques de oxígeno, les echaban agua, gracias a Dios no hubo una mayor desgracia que lamentar", dijo el ciudadano.

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Según Jeanncarlo Cobeña, del Cuerpo de Bomberos de Salitre,  la sustancia sobre la vía fue bloqueada con materiales como arena, cal y aserrín.

"No podíamos hacer un lavado para evitar la contaminación del río. A pesar de eso, se ha derramado (la sustancia) en alcantarillas y el líquido ha llegado al río, pero no en una gran cantidad", indicó Cobeña.

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La empresa municipal de agua potable paralizó la producción de la planta La Holanda, "para salvaguardar la salud de la población". (I)